Cuando hablamos de demencia o de Alzheimer lo más fácil es pensar que es algo que le ocurre a personas mayores y que nos queda muy lejos. Y, aunque posiblemente sea verdad, una encuesta del medio Parade y la Cleveland Clinic encontró que la cosa podía no ser tan sencilla y que las personas de todas las edades deberíamos estar pendientes de posibles síntomas de enfermedades cerebrales.
Jessica Caldwell, doctora y directora del Centro de Prevención del Movimiento de Alzheimer de Mujeres de la Cleveland Clinic, señala a la revista Parade que es importante que todos tengamos claro que el cerebro puede cambiar debido al proceso de envejecimiento normal, independientemente de nuestra edad. En concreto, se refiere a la demencia y como, para cuando se ha diagnosticado la demencia, probablemente haya habido señales muy claras que nos hubieran dado una pista antes: "la familia y amigos, a menudo, notan que las cosas están cambiando mucho antes de que llegue el diagnóstico".
Recordemos que en procesos de demencia y Alzheimer la detección temprana es muy importante. Por ello, la Dra. Cadlwell revela a Parade tres signos tempranos que pueden indicar que estamos teniendo problemas relacionados con la salud de nuestro cerebro.
Las tres señales de las que la Dra. Cadlwell advierte
Olvidos y problemas de memoria que parecen inocentes
Todos relacionamos los problemas de memoria con la demencia o el Alzheimer, pero solemos pensar en olvidos grandes. La realidad es que la situación suele empezar con olvidos pequeños, inocentes, que pueden ser confundidos con despistes. Cosas como que, de repente, empiece a pasar que te cueste acordarte de nombres o palabras más a menudo de lo que es normal para ti.
Problemas de atención
Notar que te cuesta algo más de lo habitual centrarte, prestar atención a las conversaciones que estás teniendo o encontrar más difícil enfocarnos en tareas que antes hacíamos con facilidad, pueden ser señales de que estamos teniendo problemas de atención.
Sentirse más lento cognitivamente hablando
Tener la sensación de que procesas la información más despacio que antes, que te sientes algo más lenta o lento de lo normal, puede ser una señal importante a la que prestar atención.
Qué podemos hacer si notamos estas señales
¿Detectar que estamos notando esas tres señales en nosotros significa, necesariamente, que estamos sufriendo algún tipo de daño cerebral o que vamos a sufrir demencia? La doctora Jessica Caldwell indica que no. Podemos estar sufriendo estas señales por otros motivos: "estrés, falta de sueño, tener muchas tareas, estar enfermos o, en el caso de las mujeres, la menopausia, puede hacer que tengamos estos síntomas".
En cualquier caso, la doctora sugiere que, acudamos a nuestro médico y le expliquemos nuestros síntomas. No es cuestión de general alarma y lo más probable es que todo se limite a una cuestión de puro estrés o vida demasiado ocupada, pero no está de más que le prestemos atención.
La experta señala, además, cosas de prevención que podemos hacer tengamos o no señales de deterioro cognitivo o, incluso, demencia diagnosticada, como: comer de forma saludable, dormir bien y hacer ejercicio.
Y, por supuesto, de nuevo, es extremadamente importante la detención temprana ya que mejora significativamente la evolución de la enfermedad y la calidad de vida.
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