Con la llegada de la primavera comienzan a apetecer tonalidades más claras y que den más luz al rostro. Pero sobre todo, apetecen vestidos. Si ya te has lanzado a rescatar tu ropa de verano y quieres adaptar tus vestidos blancos del año pasado a las nuevas tendencias y temporada, te damos siete trucos infalibles para conseguirlo.
Vestidos blancos y deportivas para las chicas todoterreno
El primer consejo para convertir un vestido blanco de 2018 en uno de tendencia en 2019 es llevarlo con deportivas. Son el calzado del momento por antonomasia y lo han invadido absolutamente todo. No podemos quejarnos, lo cierto es que el resultado es muy cañero y moderno.
Los vestidos blancos se ponen rock
Los vestidos blancos son siempre muy femeninos, delicados y dulces. Por eso nos mola ponerles un contrapunto más rockero a golpe de botas de cuero y estampado de leopardo, las dos prendas más ochenteras y rock&roll del mundo. Labios rojos y estás lista para comerte el street style.
Colores neutros que acompañarán a los vestidos blancos
Los colores tierra, nudes y beige son tendencia y han invadido todas las tiendas low-cost. No podía ser mejor momento, porque combinados con nuestros vestidos blancos les dan un toque muy sofisticado, pulido y veraniego.
Los vestidos blancos son el lienzo, ¡ponles capas encima!
La tendencia de las capas es perfecta para la primavera, convirtiendo los vestidos en faldas a golpe de ponerles jerséis o chaquetas por encima. Aprovecha tus vestidos blancos largos o midi para crear estilismos tan inspiradores y trendy como estos.
El denim parece estar hecho para los vestidos blancos
No se puede hablar de primavera sin hablar de chaquetas denim. Son una opción atemporal, por lo que podrás utilizar la que ya tengas, cuanto más antigua mejor. ¡Se lleva el estilo vintage y destroyer! Las chaquetas vaqueras van absolutamente con todo, así que los vestidos blancos no son excepción. Consejo fashion: llévalos también con botas cowboy para crear estilismos muy western.
Y en verano, vestidos blancos y cestas son el combo estelar
Si un vestido blanco es delicado y favorecedor, con un bolso de mimbre y unos pendientes dorados lo será todavía más y mejor. Una combinación muy sencilla y fresca para el verano, que nos permite presumir de bronceado sin demasiados accesorios ni complicaciones. Con un aire muy rústico y relajado, es el favorito de la temporada de calor.
Olvida el total white, a los vestidos blancos les sienta bien una pincelada de color
La tendencia de los colores flúor es imparable y está en su máximo apogeo. Si te gustaría probarla pero no quieres excederte, los complementos son una buena opción. Especialmente si los combinas con vestidos blancos, para asegurarte no patinar con tu look. Sandalias, bolsos o cinturones en tonos neón se unirán al total white esta primavera.
Fotos | Gal meets glam, Imaxtree, Gtres, Elizabeth Suzann, The Fashion Medley.