Si Chloe nos comentaba hace unos días los problemas que tenía Jessica Alba para ajustarse sus pantalones baggy firmados por Chloé, ahora la rebelión del vestido strapless se ha “cebado” con Sarah Jessica Parker, y eso que el acto al que acudía era de lo menos adecuado para dar el espectáculo…
Se trataba ni más ni menos que del estreno como director de uno de sus hermanos (son siete), Pipper Parker, al frente de un film documental que narra la historia de tres traductores iraquíes que se juegan la vida trabajando para el enemigo. Paradojas de la vida: ellos, a favor del entendimiento de quién no quiere oir hablar de diálogo, ponen en riesgo su integridad física y se ganan el calificativo de traidores por parte de sus compatriotas.
Bien, análisis políticos aparte, a Sarah Jessica, su vestido de enormes cuadros tartán en tafetán (una tela agradecidísima) le jugó una mala pasada y se le empezó a “escurrir” hacia abajo sin piedad, nada más llegar al evento. Y yo me pregunto, querida mia, ¿qué clase de “trapito” era ese? Porque yo en Nochevieja me hice con uno parecidísimo de Topshop, y no se movió de su sitio en toda la noche.
De todos modos, estimada Jessica, estabas muy guapa.
Fotos | justjared
