Reducir las prendas más preciadas de tu armario a una sola maleta es una tarea complicada, muy complicada. Así que lo mejor que puedes hacer es llenarla de vestidos que te sirvan de día, y te sirvan de noche. Los accesorios serán la clave para llevar a cabo una transformación que te ahorrará mucho espacio en la maleta.
La fórmula es sencilla: elige vestidos versátiles, como este vestido rojo de Zara (de nueva temporada, pero sólo cuesta 22,95 euros), y que queden bien tanto para looks casuales como para looks más formales. De día llévalo con sandalias planas tipo romanas y de noche, con unas sandalias de tacón en negro. Un pintalabios rojo será el toque definitivo para salir de fiesta.
Las flores son para el día... y para la noche. Veo este vestido de flores de Topshop que cuesta 29 libras para un paseo por el mercadillo con un bolso bandolera... y lo veo de noche gracias a unas cuñas o a unos peep toe con tacón.
El vestido blanco de día es cándido y puro con bailarinas y toques metalizados o de cuero, y puede ser un look explosivo de noche con accesorios con color. Encontrarás el vestido en Massimo Dutti por 59,95 euros.
Los vestidos largos como éste de Mango (19,99 euros en rebajas) te darán un toque hippie si los luces de día con un capazo para ir a la playa y de noche unido a un collar largo y a unos pendientes que destaquen puede ser de lo más glamuroso.
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