Todas nos comemos el coco con los vestidos para bodas: que si el vestido, los zapatos, el tocado,... Queremos estar perfectas y tenerlo todo controlado para lucir guapísimas. Sobre todo suele plantearnos muchas dudas el protocolo: cuando vestir de corto, cuando de largo, si se puede ir de negro, de blanco, si se puede quitar el tocado o sombrero en el banquete, en fin, un largo repertorio de temas a tener en cuenta.
La cosa se complica si la celebración de la boda se sale de lo común, por ejemplo, si la celebración de la boda es en la playa.
Si los novios quieren una boda en la playa es que buscan algo natural y poco forzado. Es el momento de lucir vestidos vaporosos, telas fluidas y livianas, algodón, y olvidarse de satenes y brillantitos.
Vestidos para bodas en la playa blancos
Es muy típico que en las bodas en la playa la invitación solicite ir de blanco. Las fotos quedan geniales con todo el mundo vestido de blanco.
En verano también se suelen celebrar muchas fiestas de estilo ibicenco. Este tipo de vestidos de encaje blanco, o con crochet, como estos vestidos de Mango, son perfectos igualmente para este tipo de celebraciones.
En corto con estilo años 60, con cortes evasés, o con un estilo folk con bordados, al que se le pueden añadir todo tipo de bisutería artesanal con la que lucir apta para la playa.
En largo nos quedamos con este vestido con escote halter con pedrería incorporada, muy años 70.
Vestidos para bodas en la playa florales
Esta foto de la campaña de D&G puede ser perfectamente la foto de una boda en la playa. Las flores alegres y los vestidos largos me parecen ideales para una boda de día, alegre y luminosa.
Elegimos este vestido de Mango con el que imitar el estilo.
O este otro, con escote en forma corazón y falda estilo pareo con estampado pasley.
Vestidos para bodas en la playa de color
Si preferimos el color para la boda en la playa, lo mejor es decantarnos por las tonalidades del mar: turquesa, azul, o verde. Como este vestido de Zara con escote palabra de honor.
O de nuevo, el nude y el estilo bailarina pueden ser los elegidos. Este vestido de Mango es precioso, aunque me parece excesivamente caro (casi 200 euros).
A una boda en la playa se le une la complicación de la arena. No es el momento de caminar subida a taconazos, así que olvidate de tus Jimmy Choo o Louboutin para la boda. Lo mejor, sandalias planas, o si no quieres renunciar a unos centímetros más, prueba con unas alpargatas con cuñas. Incluso se puede ir descalza.
Fotos | Green Wedding shoes