Es la cascada más bella de España y se pone aún más bonita en otoño, pero los turistas no lo saben

Si buscas un lugar escondido y mágico a solo hora y media de Barcelona, Cantonigròs es tu próxima parada. Este pequeño pueblo en la comarca de Osona esconde uno de los secretos mejor guardados de Cataluña: una cascada de 15 metros de altura que nace de un agujero en la roca y no tiene apenas turistas. Puedes incluso dormir allí y es una pasada.

La cascada secreta más bonita de España

Esta cascada es conocida como el Salt de la Foradada de Cantonigròs y parece sacada de un cuento. Lo más impresionante es que el agua no viene de un río o lago, sino que nace de un agujero en la roca, creando un espectáculo visual único rodeado de vegetación exuberante. Perfecto para desconectar del mundanal ruido y encontrar esa paz que a veces parece imposible de alcanzar en la ciudad.

Para llegar a este salto de agua puedes hacer una ruta de senderismo espectacular, que nace desde el campo de fútbol del propio pueblo. La caminata es corta, pero te regala unas vistas increíbles de la cascada y su poza de aguas en tonos azul turquesa.

Eso sí, hay que tener en cuenta que tiene un aforo de 50 personas y un precio de 2,50 euros, así que no está abarrotado de turistas. Además, puedes hacer noche en autocaravana por 3 euros. Esto se paga en el parking del pueblo antes de comenzar la ruta a pie. Aunque el baño está prohibido para preservar el entorno, no te faltarán cosas que ver en los alrededores.

Qué ver y hacer en Cantonigròs

Cerca de la cascada puedes explorar otros enclaves naturales bellísimos, como la ruta del Morro de l'Abella que termina en una roca colgada sobre un precipicio desde donde tendremos increíbles vistas del pantano de Sau o el mirador de Ter, monumento nacional desde 1931 por sus increíbles panorámicas de la región.

En el propio pueblo está también la Masía les Planes, una antigua masía milenaria perfectamente reformada. Además, a menos de una hora del pueblo, siguiendo una carretera serpenteante de montaña, se esconde el Monasterio Benedictino de Sant Pere de Casserres del año 1053.

Así que ya sabes, si estás buscando una escapada diferente, Cantonigròs es el sitio ideal para perderte (literal y figuradamente) y descubrir uno de los rincones más bonitos y menos conocidos de España y de Cataluña. Incluso en otoño, porque los bosques se tiñen de tonos ocres y la preciosa cascada cobra una belleza diferente.

Fotos | Ajuntament de L'Esquirol, Wikipedia Commons, Barcelona Film Commision.

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