Hay dos tipos de personas en este mundo: los que prefieren las playas grandes y de arena y quienes siempre están a la búsqueda y captura de una cala más escondida y recóndita que la anterior. En ese sentido, la Costa Brava es una mina de calas conectadas, en muchos casos, por los Caminos de Ronda, que recorren los municipios pegados a la costa. Desde Blanes hasta la frontera francesa, entre acantilados y árboles o casitas de post de Instagram. Hay para todos los gustos.
Sa Conca señorial
es.costabrava.org
S'Agaro es un lugar que han elegido muchos famosos para pasar unas vacaciones. Desde Ava Gardner o Liz Taylor (que rodaron allí) hasta Sean Connery o John Wayne, y pasando por Luis Miguel. Una localidad en la que se pueden encontrar calas rodeadas por casas señoriales valoradas en millones de euros aunque, entre todas, destaca Sa Conca. Se extiende por 400 metros por 42 de ancho dividos en dos tramos y separados por el islote rocoso de Sa Conca. Cuenta con fácil acceso a pie por el camino de ronda y es de arena gruesa.
Hotel Eden Roc
Sa Tuna
@miayuste
Sa Tuna es una pequeña cala de Begur que conserva sus antiguas casas de pescadores y que, además, cuenta con una pequeña caleta en el lado derecho (llamada S’Eixugador). Un paraje salvaje y de una hermosa quietud que, por su situación resguardada y acceso tortuoso, siempre resulta un descubrimiento insospechado para quien la visita. Se puede acceder por el Camino de Ronda.
Illa Roja
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La cala de la Illa Roja es otra de las más populares de Begur. Con más de 180 metros de longitud, es conocida en todo el mundo como una de las más bellas y grandes de España. Su fama se la debe a su entorno natural y a su islote rocoso que se torna rojo al amanecer y al atardecer. Además, es conocida por permitirse el nudismo y ser una de las calas más tranquilas de la Costa Brava.
Aiguablava
visitbegur.cat
Es una de las calas más populares, no solo de Begur sino también de toda Cataluña. La arena que la conforma da lugar a un color turquesa al agua que la hace inconfundible y, a la vez, muy agradable. Además de que su entorno paisajístico la hace única. La playa, que mide 40 metros de largo por 80 de ancho, dispone de baños y opera en la orilla un centro de buceo y de alquiler de kayaks.
Parador de Aiguablava
Aigua xelida
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Pequeña, escondida, enigmática, espectacular y, sobre todo, preciosa. Así es la cala de Aiguagelida (también conocida como Aigua gelida o Aiguaxelida), un rincón maravilloso al alcance de cualquier visitante de la Costa Brava que sepa dónde se encuentra y lo que ofrece. Ubicada al norte de Tamariu. Cabe destacar que lo que se considera Aigua Xelida es en realidad la suma de de varias calitas más pequeñas: Sorellera, En Gotes, Fonts y la central, Grans. Todas ellas se sitúan al final de una lengua de mar que crea un bonito pasadizo.
Hotel Hostalillo Tamariu
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Foto de portada | iStock
