Dormir en un barco es tendencia: 9 ciudades de Europa donde probar la experiencia

Si habéis planificado un viaje por Europa esta Semana Santa, seguro que habéis escuchado por todas partes la palabra 'botel'. Los boteles son tendencia para alojarse en las ciudades más importantes de Europa, así que no me he quedado atrás a la hora de probar la experiencia. ¿Que qué es un botel? La palabra procede de la síntesis de 'boat' y 'hotel' y consiste, básicamente, en eso: un barco que en realidad es un hotel, y viceversa. Os invitamos a conocer las ciudades más propicias para alojarse en un botel:

Budapest

Una ciudad en la que el Danubio tiene tanta presencia como en Budapest parece la opción ideal para alojarse en pleno río, con sus vistas al Parlamento y su iluminación nocturna, a las colinas de Buda y al Puente de las Cadenas.

Nuestra recomendación: Fortuna Boat Hotel. Frente a isla Margarita y con la opción de elegir entre la versión hotel o el más económico hostel. Desde 41 euros (habitación doble).

Bratislava

Bratislava parece más un pequeño pueblo centroeuropeo que la capital de un país, pero rezuma encanto por todos sus rincones. La vida de la ciudad se articula en torno al Danubio y nada mejor que un botel para tomarle el pulso.

Nuestra recomendación: Marina Botel. Bajo el castillo de la ciudad y con vistas al Puente Nuevo y el barrio de Petrzalka. Y con un restaurante indio que te hará creer que estás en la mismísima Calcuta. Desde 39 euros (habitación doble).

Brujas

Una de las ciudades más bonitas de Europa y el lugar ideal para una escapada en pareja. Si el típico paseo en bote por los canales, entre el Grote Markt, el Beguinaje y la Catedral, os deja con ganas de más, alojarse en un botel puede ser la solución.

Nuestra recomendación: Botel de Barje. Un poco alejado del centro, pero la opción ideal para despertar en un entorno idílico con los patos dando los buenos días. Desde 109 euros (habitación doble).

Estocolmo

En el corazón de Escandinavia, entre premios Nobel, barcos antiguos y la atmósfera del Gamla Stan, Estocolmo se queda grabado en la retina de los visitantes. Tan importante como la ciudad es el archipiélago que la rodea, con algo diferente que descubrir en cada isla.

Nuestra recomendación: LogInn Hotel. Ubicado en Södermälarstrand, y con unas vistas excelentes de la ciudad, este botel construido en 1928 solo puede añadir más encanto a la visita a la ciudad. Desde 96 euros (habitación doble).

Amsterdam

Nadie le puede negar a Amsterdam la paternidad de las boathouses, así que los boteles no podían faltar en la capital de Holanda. Entre canales, museos y coffee shops, destacan varios de estos alojamientos, ideales para descansar tras recorrer la ciudad en bicicleta.

Nuestra recomendación: Amstel Botel. Situado en el centro de la ciudad, ofrece servicio de ferry gratuito a la estación de tren y una buena conexión en tranvía con la plaza Dam. Desde 70 euros (habitación doble).

Praga

Probablemente, la primera imagen que todos los visitantes de Praga se llevan del río Moldava (Vltava, en checo) es desde el mítico puente de Carlos. Praga es mucho más que su icono más representativo y nada mejor que caminar por sus calles empedradas para descubrir la ciudad.

Nuestra recomendación: Botel Racek. A diez minutos del centro, junto al castillo de Vyšehrad, es una opción ideal para descubrir los otros cinco distritos que componen la capital checa. Desde 22 euros (habitación individual).

Gibraltar

Si, en lugar de recorrer alguna de las grandes capitales del norte de Europa, preferimos el sol del sur, Gibraltar y su entorno pueden ser una opción perfecta. Y mucho más cerca de casa.

Nuestra recomendación: Sunborn Gibraltar. Alojarse en un barco puede ser sinónimo del lujo más exclusivo. Y no hay un ejemplo mejor en toda Europa que el Sunborn, un hotel de cinco estrellas flotante que no decepcionará a nadie. Desde 179 euros (habitación doble).

Copenhague

En una de las ciudades referente del diseño del norte de Europa, tenemos muchas opciones de ocio y ninguna nos dejará indiferente: su centro histórico medieval, el parque del Tívoli o el Palacio de Amalienborg. Y, por supuesto, la mítica foto con la Sirenita.

Nuestra recomendación: CPH Living. Un barco moderno, con decoración escandinava, grandes ventanales y unas vistas de escándalo de la ciudad. Desde 158 euros (habitación doble).

Gante

A la sombra de su vecina Brujas, Gante tiende a pasar desapercibida, pese a contar con maravillas como el Castillo de Gravensteen, la Catedral (con su Adoración del cordero místico), el campanario de Belfort y, sobre todo, las dos orillas de su canal principal: Graslei y Korenlei.

Nuestra recomendación: Ecohostel Andromeda. Una barcaza reconvertida, con un fuerte espíritu ecológico, sin sacrificar el confort. Desde 65 euros (habitación doble).