Los zapatos feos que molan, o cómo las track soles pretenden conquistarnos

Ubiquémonos en el tiempo, desfile de Stella McCartney Otoño-Invierno 2013/2014, y ahora pasemos a la acción. No sabía si reír o llorar, si dejar de mirar a los pies de las modelos y centrarme en los diseños u horrorizarme profundamente por lo que estaban viendo mis ojos, ¡Stella McCartney había subido a la pasarela unos zapatos feísimos! Con lo que me gusta a mí McCartney… Y así es como las track soles llegaron hasta nuestros días.

Si las botas cut out de Balenciaga me parecieron un pelín mamotreto nada más verlas, los zapatos de Stella McCartney no fueron menos, poco más y me llevo las manos a los ojos para dejar de mirar semejante crimen al buen gusto, pero claro, luego llegan las Semanas de la Moda y pasa lo que pasa, que empiezan a verse por aquí y por allá.

Miedito me da que se pongan de moda las track soles o suelas tractor – así he decidido bautizarlas yo por la similitud de las suelas con las ruedas de dicho vehículo –, aunque ya hay tiendas low-cost que anuncian algunos de sus zapatos como “Track shoe”, y no, no son precisamente zapatillas para hacer atletismo, pese a que su significado más extendido sea ese.

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