Hace un tiempo mi compañero Jose Luis habló de tres complementos que no podían faltarnos en nuestro armario, desde un bolso de Dior, hasta una maleta de viaje sofisticada de Vuitton, tres recomendaciones impecables. Hoy os traigo tres bolsos para complementar a nuestro estilo favorito.
Los bolsos en los hombres aún no se han establecido como algo "normal", se sigue viendo como una prenda demasiado femenina y para ciertas personas, un prejuicio tan absurdo como falso. Los bolsos están llegando a un nivel de diseño que son auténticas joyas, tanto para hombre como para mujer, sin que por ello se tenga que ver uno categorizado como un bicho raro.
Europa nos sigue llevando ventaja (como en todo). La semana pasada estuve en Praga y allí es un complemento que se ve más que por Madrid, pese a que se está haciendo su sitio (lento, pero lo intenta). La mezcla entre turistas de todas las partes del mundo hacen a la ciudad muy cosmopolita y puedes ver desde al japonés más kitsch hasta al hombre más hortera. Hay de todo, pero sobre todo, me llamó la atención el auge del bolso masculino.
Lo malo de todo esto, es que al igual que en la calle se ven pocos, en Internet las marcas no cuidan este sector, no hay casi imágenes detalladas, como sí las hay para los bolsos de mujer. En la calle de París, en Praga, están todas las marcas de lujo, al estilo de Serrano en Madrid. Podemos ver Hermes, Louis Vuitton, hasta Hugo Boss; están todas las de renombre.
Y con ellas, las prendas más innaccesibles para la mayoría de las personas. Me quedé con la imagen de tres bolsos masculinos impecables, uno de Salvatore Ferragamo, otro de Dunhill y otro de Gucci; pero ninguno está en Internet, así que me ha tocado suplir las imágenes con otros diferentes.
El primero de Salvatore Ferragamo, muy diferente al que vi pero con una cuidada línea deportiva y de sport, a la par que estilosa. Con un azul cuero y el negro para las cremalleras. Sólo tiene una pega, y es la que podemos encontrar en la mayoría de los bolsos de hombre. Están empeñados en hacerlos parecer maletas o bolsas de deporte, y eso no tiene ningún sentido. Un bolso es un bolso.
El segundo es totalmente diferente, de Gucci sí, pero ni aproximado al visto con anterioridad. Este sigue apostando por la línea de bolsa deportiva, en forma ovalada, con el estampado de la marca característico, y con los colores en medio haciendo una bonita separación. El que se tenía visto era uno de cuero, con unas líneas muy estilosas y de alta categoría.
Y el tercero, y último, se ha tenido que cambiar. Dunhill sólo nos ofrece en la web maletas o maletines de trabajo, única justificación que parece tener el hombre para llevar un bolso. Así que había que buscar otro y ha sido elegido uno de la colección Burberry Prorsum para la primavera/verano de 2009. Se puede apreciar muy poco (en la web ni rastro de más información), pero todo apunta a ser un modelo muy elegante, en cuero marrón claro, al estilo de las clásicas carteras.
Así que ya sabéis, nada de prejuicios, el bolso en el hombre de aquí a unos años será una prenda tan indispensable como lo es en la mujer. Las grandes marcas quieren conseguir este nicho de mercado y explotarlo por los jugosos beneficios, pero nosotros lo que queremos es una línea hecha con detalle y nada de maletas para lucir.
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