Cuando hablamos de esta película, de Vicky Cristina Barcelona, título que cuando se dice siempre se olvida una parte y resulta rarísimo, hablamos a la vez de un tándem entre director y actores de lujo. Sólo al alcance de un nombre como Woody Allen. Pocos directores ahora mismo podrían juntar a estas estrellas sin tirar de talón.
El caso es que el prestigio y la genialidad de Allen sobrepasa cualquier talón y muchos actores se rebajan su caché para trabajar bajo sus órdenes. Entre ellos está, Scarlett Johansson, quien se ha convertido en musa del director, participando en la mayoría de sus últimas películas en los últimos años.
Para esta ocasión, Woody Allen ha decidido contar con dos de los actores españoles más importantes. Javier Bardem y Penélope Cruz serán los otros dos protagonistas en el triángulo amoroso del film, donde Bardem será el hombre a desear.
Para la premiere de Vicky Cristina Barcelona, se pasaron todos estos rostros. De todos ellos, yo me quedo con Penélope Cruz. Admiro la clase que está cogiendo la española, siempre brillante. Me dejó boquiabierto en cada aparición en Cannes, y lo vuelve a hacer en Los Ángeles. Con un escote bastante sugerente, y un vestido muy entallado, la actriz
Por su parte, la siempre sensual, Scarlett Johansson, prefirió un vestido rojo pasión que iba acorde con su imagen últimamente. Pese a que esta vez la estadounidense no luciese uno de sus escotes, estuvo sensacional, con el peso suelto en melena, sin recogido, y con un collar como complemento; además de su llamativo maquillaje que nunca falta.
La presencia masculina estuvo representada mediante Javier Bardem. Sonriente, muy simpático como siempre, y apto para la ocasión. Un sencillo conjunto de traje, donde prefirió la chaqueta de un solo botón, una corbata demasiado fina para mi gusto, y el resto habitual: negro y blanco.
Entre las invitadas, destacó la presencia de Salma Hayek. Quien lo tiene más fácil para asistir por la proximidad de su residencia. La actriz mexicana lució el único vestido de la noche que no me convence. Con muchos pliegues, y con un largura hasta casi las rodillas, el vestido azul no benefició a Salma Hayek, quien es muy bajita y necesita otro tipo de vestidos para disimular este hecho. No la vi como uno de sus momentos a destacar.
Y por último, el grande entre los grandes, Woody Allen. A quien no se le suele mencionar cuando hablamos de la premiere de su última película. El director, uno de los talentos más importantes del cine moderno, con su estética de siempre. Tranquilo, sin preocuparse casi nada por su apariencia y con las gafas que le han caracterizado.
En Trendencias | Rebecca Hall y Salma Hayek en Cannes en la premiere de Vicky Cristina Barcelona
Ver 17 comentarios