En plena Bienal de Venecia 2019, un artista que no participa de forma oficial en la prestigiosa exposición de arte es quien se está llevando la atención internacional.
Se trata de Banksy, el enigmático artista urbano británico, que se ha presentado en la ciudad italiana para hacer de las suyas.
Ya, hace unos días, apareció de la noche a la mañana en el Gran Canal de Venecia el grafitti de un niño migrante con un chaleco salvavidas que sostiene en alto un destello de color rosa neón.
El dibujo reúne todas las características para ser del famoso artista, sin embargo, ni Banksy ha reclamado su autoría ni Pest Control, el organismo de autentificación de su obra, lo ha confirmado.
Unas dudas prudenciales que ahora parecen completamente despejadas con la aparición de un nuevo mural en la Plaza de San Marcos.
Se trata de un montaje de lienzos que juntos forman un gran crucero, representando uno de los miles que pasan todos los años por la ciudad.
Se titula Venice in Oil y el artista lo ha presentado al mundo a través de un vídeo en su cuenta de Instagram que ha acompañado del siguiente mensaje:
"Preparando mi puesto en la Bienal de Venecia. A pesar de ser el evento de arte más grande y prestigioso del mundo, por alguna razón, nunca me han invitado".
Además de denunciar este hecho, con sus nuevas obras también llama la atención sobre dos temas sociales de suma importancia en la actualidad: la crisis de los refugiados y el turismo masivo.
De hecho, el tema de la crisis está muy presente este año en la Bienal, que se ha titulado May You Live in Interesting Times. Algo que tiene como objetivo, según ha explicado su comisario, denunciar cómo "el capitalismo tardío va de crisis en crisis". Además, tampoco es la primera vez que Banksy trata en su obra el tema de la migración.
Con Venice in Oil, la crítica parece claramente orientada al daño social y ambiental que ocasiona a un lugar el turismo de masas. Un problema que conoce bien Venecia, que este año ha implantado una nueva tasa de entrada para las estancias sin pernoctación con el objetivo de controlar el turismo de cruceros.
Curiosamente y, a pesar de la tercera denuncia del artista de no ser invitado a la exposición de arte, esta obra ya ha sido desmontada al no contar con las licencia necesaria.
Fotos | Instagrams de Lapo Simeoni y Banksy dealer.