Soy una apasionada de la belleza por necesidad. Tengo la piel frágil desde siempre. Pero además, mi hija tiene la piel seca y acaba de salir de los procesos de piel atópica de la infancia. Por todo esto conocía A-Derma y me pareció una gran idea acudir a un viaje organizado por la la firma para ver en directo sus cultivos de Avena Rhealba, el ingrediente principal de la marca. Una de cada cuatro personas sufre, en el mundo occidental, alguno de estos problemas de la piel. Cuál es mi sorpresa que el viaje, por el sur de Francia y bellísimo, lo hago con más de 15 sabios farmaceúticos. De los mayores expertos de A-Derma y de muchos de estos profesionales, os traigo consejos para piel frágil y atópica. Empezamos el viaje:
Hasta hace poco pensaba que tenía piel sensible, pero creo que la palabra frágil se acerca más a mi realidad: cuperosis (leve menos mal), pequeños eczemas, herpes simple en el rostro (cuando me bajan las defensas), dermatitis... Sensible es una cosa, pero lo mío va un paso más allá. Desgraciadamente. Y cómo os digo mi hija mayor también tiene la piel frágil y seca, aunque ha dejado atrás los brotes de piel atópica. Ese mal de la piel de nuestro tiempo que tiene a tantos niños atrapados en procesos dolorosos y de picores. Por eso conozco A-Derma, de los mismos laboratorios que Ducray y que Eau Thermal de Avène. Descubrí este producto cuando a mi hija le recetaron Exomega Barrera: Una crema única que crea una película para que el cloro de la piscina no llegue a los brotes de dermatitis. La peque pudo ir con sus compis a la piscina de nuevo. Luego salió A-Derma Rheacalm. Y a mí me la recetó el dermatólogo y me ha ido genial para las dermatitis. ¿Y qué tiene A-Derma para que funcione? Sus responsables responden: Cobre, zinc y Avena Rhealba.
Avena Rhealba y controles de calidad contra la piel atópica
La avena Rhealba es una especie única, nos cuentan los responsables de A-Derma mientras visitamos la plantación que los laboratorios Pierre Fabre tienen en el sur de Francia, cerca de Touluse, en Castre. Nos cuentan que los cultivos son propios, para no depender de otros, para mantener la pureza de los mismos y además mueven la economía de la región y preservan el terreno y los cultivos. También destacan que Pierre Fabre empieza formulando un producto oncológico y esta avena se usa también en alguno de sus medicamentos oncológicos. Por eso, los rigurosos controles que se utilizan para la fabricación de sus productos oncológicos, se llevan a cabo aquí, pero también en el proceso de producir las cremas. En total hay hasta 27 puntos de control, nos explican.
Marco en la Tierra de Avena. Atrás, las plantaciones. Delante, las plántulas de Avena Rhealba
Treinta años de investigación hay tras la fórmula de A-Derma y en la plántula de la avena reside en secreto. Así nos lo cuentan: El señor Pierre Fabre, supo que en EEUU la avena se usaba para aliviar problemas de la piel y comenzó su investigación. Encontraron que la Avena Rhealba era la que tenía más lípidos, la más suavizante y emoliente. También su equipo de investigación descubrió propiedades únicas en la plántula de la avena Rhealba. La plántula es un brote joven entre 10 y 12 semanas de vida que, nos dicen los portavoces del laboratorio, está en su riqueza máxima: rebosa de activos que necesita para sobrevivir y crecer hasta hacerse "adulta". Esos activos son los que busca el laboratorio. Unos agrónomos hacen controles continuos con herramientas que miden la cantidad de clorofila, que es dónde se encuentran los flavonoides que necesitan, y llega el momento, casi el instante, en que la planta presenta su máxima riqueza. Entonces, la cosechan para extraerle moléculas específicas en su máxima eficacia. Sólo tienen dos días para cosechar (hay fechas en las que los agricultores están casi en guardia). Luego hay que sacar muy rápido el extracto para que no pierda propiedades.
Cómo no dejan que la planta tenga flor, han de plantar más de lo que necesitan para perpetuar los cultivos. Las semillas de esa avena se usan para leche de productos higiénicos y para plantar de nuevo la Avena Rhealba que habría desaparecido. Cada año, pasan una auditoría anual que les garantiza tres cosas: la máxima calidad del producto, el mejor impacto en la biodiversidad y el mejor trabajo de los agricultores. Son 40 km de plantaciones (que se replica cerca de Burdeos dónde el clima es diferente para asegurar la cosecha si hay un mal año climático), y no se usan pesticidas ni fungicidas lo que les permite tener el sello de cultivo biológico. Cada año salen de aquí 300 toneladas de masa vegetal para sus productos.
Un experimento interesante para ver cómo funciona la leche Micelar A-Derma
Para entender un poco algunos de sus productos, en un pequeño laboratorio de este lugar, vimos un experimento con la Leche Micelar Sensifluide de A-Derma. Se trata de un limpiador facial, pero que la vez hidrata. No hace falta aclarar y la piel no tira como con el agua micelar. Parece que el producto, gracias a su formulación, captura las micelas en una red q se hace con la leche y cuándo te la aplicas, la sal de la piel rompe la malla. El experimento fue muy sencillo. Echamos sal en la leche y vemos perfectamente la reacción de como se rompe (con pequeños agujeritos). Con Exomega Barrera, vimos también con agua azulada con colorante, que el agua no pasa la barrera que crea en la piel y así no llega el cloro de piscina a la piel de los atópicos.
Consejos para pieles atópicas
Hemos aprendido mucho sobre la avena Rhealba. Hemos visitado la fábrica de A-Derma. Pero lo importante creo que está dicho: Producto de cultivo biológico (luego el producto no tiene el sello bio), mucha investigación hasta llegar a las plántulas con propiedades únicas y el mismo control que el producto oncológico para que llegue a ser lo más beneficioso posible. Pero los que tenéis pieles sensibles o atópicas, querréis saber más. Sobre todo, si los brotes son muy fuertes. Por eso, pregunté a farmaceúticas y farmacéuticos que nos acompañaron.
¿El producto estrella de A-Derma para pieles atópicas según todos ellos? Exomega. Nieves, de la farmacia Boulevard (Arroyomolinos), nos dice: "Para mi A-Derma es lo único que cura la dermatitis porque regenera la piel". Otra compañera de viaje, Elisa, farmacéutica y experta porque además tiene la piel frágil (cómo a mi hija le salen erupciones con los cambios de temperatura), siempre recomienda agua termal de Avene y Exomega de A-derma para mantener a raya la dermatitis. Elisa, además, es de Elda y en Moros y Cristianos, las madres se llevan Exomega Barrera para debajo de los maquillajes (tengan o no problemas, las irritaciones llegan con el exceso de maquillaje). Una muy joven farmacéutica de Barcelona experta en dermocosmética, nos asegura que es muy importante no agredir a la piel durante el aseo y asegura que en ese terreno, Aceite de baño Exomega es lo mejor para los brotes y gel de baño para mantenimiento. Aclaro que precisamente lo que no tiene su gel ni su aceite es jabón, porque este es muy fuerte para la piel atópica. De ahí, el éxito de su pan de avena, el primero que nació sin jabón.
Todos los farmaceúticos destacaban cómo interesante para las pieles más reactivas y sensibles que A-Derma tiene producto disponible en un envase estéril: gracias a una patente creada por Pierre Fabre que hace que las cremas se mantengan al vacío todo el tiempo y así no necesita conservantes. Este envase especial está disponible también en otros productos de la marca: Avène o Ducray por ejemplo. Siempre tratando de que llegue menos productos que puedan agredir las pieles sensibles o enfermas. Sube un poco de precio, eso sí, pero es interesante probarlo, si los casos son graves.
También estuvimos con Covadonga González, Directora Comercial de Ducray y A-Derma en España, y le preguntamos por sus recomendaciones para algunos problemas específicos de la piel más allá de la piel atópica. Aquí os traigo sus consejos, con mis notas:
Eczemas: Covadonga recomienda Exomega, al igual que para la piel atópica. Yo os cuento que tiene una gama enorme.También geles desmaquillantes para cara y ojos, sin jabón y producto estéril para los atópicos con mayores problemas.
Xerosis o pieles secas (patológicas): Para Covadonga, lo mejor es Nutrialba. La que más hidratación aporta. Esta es la que empiezo a usar desde ya para mi pequeña. Pieles con irritaciones localizadas, reacciones puntuales de la piel: Dermalibour. Recomiendo su stick para llevar en el bolso o en la riñonera. Muy bueno para roces que se hacen los deportistas y runners por culpa de la ropa: (pezones e ingles por ejemplo) y para la gente que, por el sobrepeso, tiene roces y sarpullidos en las axilas o las piernas.
Pieles reactivas intolerantes: Rheacalm. Esta me va a mí genial, el contorno de ojos que es muy concentrado lo uso en cuánto tengo un brote de dermatitis (aunque no sea en el contorno de ojos, y lo para; incluso si noto picor por el herpes en la cara, si es muy pronto, freno el brote). Es muy buena también para después de tratamientos faciales agresivos, o tras depilación por láser, para recuperar la piel.
Este viaje al centro de la Tierra de la Avena Rhealba, además, me ha hecho descubrir la fuerza de los Laboratorios Pierre Fabre. Todos conocemos Avène, pero hay mucho más. Sobre todo, una parte de medicamentos que es fantástica porque cura y sienta unas bases que hacen que la dermocosmética funcione. Estuvimos en la finca dónde se reúnen los directivos del mundo entero, la finca Carla, con un precioso restaurante en un bosque increíble y una sala con productos vintage de la empresa. Allí, me resultó fascinante el mapa de la actividad de los laboratorios que podéis ver abajo. Muy interesante también descubrir que, al morir el fundador de la empresa y principal accionista, Pierre Fabre, dejó sus acciones a la Fundación Pierre Fabre. Con proyectos en el mundo menos desarrollado, especialmente en África para conseguir que lleguen buenos medicamentos a los más desfavorecidos (hay mucho medicamento falso en África), recuperar sus acuíferos y su vegetación y mejorar la educación en farmacia.
Espero haber ayudado a que conozcáis alguna fórmula nueva que os pueda ayudar y os alivie las molestias y picores de la dermatitis atópica. Ya sabéis que cada piel es un mundo, pero de momento cuándo lo he recomendado, me lo han agradecido. Y creo que A-Derma puede convertirse en una marca referente en nuestro tocador y en el día a día de nuestros hijos. Esperemos que pronto vengan también con solares, que tan necesarias son.
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