Atención a las amantes del eyeliner en todas sus versiones, porque Begoña Vargas ha llevado uno en la alfombra roja de clausura del Festival de Cine de San Sebastián que es puro amor. Un diseño muy sofisticado y cargado de brillo que nos ha dado muchas ganas de recuperar los delineados rasgados sin complicaciones.
La actriz ha apostado por un maquillaje muy favorecedor a su tono de piel, a golpe de tonos neutros en los labios y unos pómulos muy bien trabajados con blush y con iluminador, haciendo de sus facciones mucho más marcadas de forma natural. Todo ello pensado para que las miradas se vayan directas a los ojos.
Una oda a la elegancia italiana atemporal, con un maquillaje que siempre funciona y no entiende de tendencias. Porque su maquilladora Noemí Nohales ha escogido este delineado rasgado y fino, que está perfectamente terminado con un rabillo afilado y unas pestañas muy intensas y dramáticas. Pero todavía hay más, porque el toque final es el que lo hace más especial.
Precioso al detalle de las sombras perladas, que iluminan párpados y pómulos llenándolo todo de luz y de efecto glitter, pero de una forma difuminada y glamourosa. Algo parecido a lo que hizo Rihanna hace unos años y que ha conseguido llevar el look beauty de Begoña Vargas al infinito. Pura magia hecha maquillaje.
Fotos | Gtres.