Los vestidos con los hombros al aire están a la orden del día en todas las alfombras rojas: una manera discreta y elegante de resultar sexy. Cuando los vestidos son largos hasta los pies y no se puede enseñar pierna, hay que compensar por otro lado, y los hombros y la línea del cuello de una mujer son unas de las curvas más sexys que podemos potenciar. Te enseñamos cómo lucir un escote de miedo.
El enemigo número uno de los escotes palabra de honor son los hombros sin forma, y el pecho caído: en este post os damos unos consejos tanto de ejercicio como de corrección postural para que saquéis el mejor partido posible a estos vestidos tan sugerentes y para que luzcáis como verdaderas estrellas en vuestra propia alfombra roja.
Hombros con forma y en forma
Unos hombros trabajados dan estructura a nuestro cuerpo y hacen que los vestidos y camisetas con escote palabra de honor, halter o con tirantes luzcan infinitamente mejor. Incluso los vestidos con mangas se ven mucho mejor cuando tenemos una buena materia prima en cuestión de hombros.
Lo ideal sería que la línea de los hombros fuera paralela al suelo, formando una línea recta, y que en los extremos se vieran unos hombros redondeados. Con unos hombros bien formados, además, podemos compensar unas caderas un poco anchas, y si ceñimos la cintura del vestido podemos conseguir una bonita silueta tipo "reloj de arena".
Los ejercicios que podemos realizar para conseguir que nuestro deltoides (el músculo que recubre el hombro) se vea con forma y definido son elevaciones frontales y laterales con mancuernas (subimos con los codos ligeramente flexionados sólo hasta la altura de la clavícula) y press de hombros (con los brazos flexionados y desde la altura de éstos, estiramos los brazos hacia arriba). No hace falta que cojáis mucho peso: los hombros son músculos pequeños y que se agotan rápidamente.
El pecho, en su sitio
Hace poco hablamos en otro post sobre cómo prevenir el pecho caído, y es que tener el pecho en su sitio mejora el efecto óptico de todo el conjunto. Cierto es que podemos usar un sujetador para crear un buen efecto visual, pero si vamos a llevar un escote muy pronunciado o la espalda descubierta habrá que prescindir de él.
En estos casos, es bueno que nuestro pecho tenga un buen soporte muscular que podemos trabajar con diferentes ejercicios como las flexiones. Para principiantes podemos comenzar haciendo las flexiones de pie y contra la pared; más tarde podemos pasar al suelo apoyando las rodillas, y finalmente llegaremos a hacer flexiones sobre la punta de los pies. Si queréis darle más intensidad al ejercicio e implicar tambien los hombros, podéis colocar los pies en alto sobre un banco o una silla.
La postura, primordial
Muchas veces el problema de los hombros caídos radica en que llevamos una postura incorrecta debido a distintos factores: muchas horas sentados frente al ordenador, pantallas de pc demasiado bajas, espalda demasiado curvada con el consiguiente dolor lumbar y cervical, muchas horas mirando el móvil o la tablet en el regazo... Todas estas cosas acaban transfiriéndose a nuestra postura corporal, y acabamos cada vez más encorvados.
Llevar los hombros hacia atrás y hacia abajo (no pegados a las orejas) y el pecho al frente (imaginad que tenemos un foco de luz en el esternón que debe enfocar siempre hacia delante) hace que nuestro abdomen se contraiga y que visualmente crezcamos unos centímetros. Nuestra presencia se verá mejorada sólo con este sencillo gesto.
Además, para mejorar nuestra postura es muy bueno realizar estiramientos de la zona del pectoral, sobre todo después de realizar ejercicio, para que las fibras de esta zona no se acorten y tiren de los hombros hacia delante. Uniendo nuestras manos por detrás de la espalda y manteniendo la postura damos amplitud a la zona del pecho y estiramos los músculos.
Siguiendo estos consejos podréis lucir un buen escote palabra de honor que hará que arraséis en las fiestas, ¿os animáis?
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