La marca del Dr. Hauschka es una de mis favoritas y uno de sus productos más famosos es la mascarilla reafirmante de rosas. Reconozco que esta mascarilla es una habitual entre entre todos mis potingues ya que nunca se sabe cuando mi piel puede necesitar un extra de hidratación.
Como su nombre indica las rosas son la base de su fórmula, en agua, en extractos, en aceite y en cera. Concretamente la variedad de rosa que se utiliza en esta mascarilla es la rosa damascena, una variedad de rosa que se cultiva en Bulgaria y en Turquía y que entre sus propiedades más importantes destaca la regeneración y el efecto calmante en pieles sensibles.
Incluso por su efecto en la piel, podríamos decir que más que una mascarilla parece casi una crema reafirmante. A pesar de que se venda como mascarilla yo la suelo utilizar a veces como si fuera una crema, ya que se esparce con gran facilidad. Si la quiero usar de mascarilla pues ya me aplico generosamente por todo el rostro y cuello y la dejo reposar unos 20 minutos.
Lo que más me gusta de la mascarilla, aparte de su composición a partir de aceites naturales, es su inconfundible olor a rosas y el efecto calmante e hidratante que se nota casi de inmediato y que se multiplica si, como os dije antes, la dejáis reposar durante más tiempo.
Aunque para mi tiene un gran pero y es que entre sus ingredientes se encuentra el alcohol. En una cantidad mínima, pero si lo suficiente para que si tienes algún granito, zona especialmente irritada, o punto rojo puedas sentir una ligera sensación de escozor, sin llegar a picar.
Otra de las características que he notado de esta mascarilla es que el rostro se tersa ligeramente, pero sólo ligeramente, sin llegar a dejar la piel excesivamente tirante y se absorbe con bastante rapidez dejándote la piel muy jugosita y flexible. El color de la crema es rosa pastel, pero no deja ningún rastro de color en el cutis y se esparce con gran facilidad.
Su precio tampoco es uno de sus puntos fuertes, ya que roza los 40 euros en un envase de 30 ml. pero a decir verdad a pocas mascarillas reafirmantes he podido sacar tanta utilidad.
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