Muchas ganas había en Ifema de ver la primera colección femenina de Etxeberría tras su paso por Nueva York. Con el nombre de Pura Piel y sabiendo lo bien que trabaja este material el vasco, no cabe duda de lo que íbamos a ver: una colección primavera-verano 2015 en la que aparecen el cuero, la napa, el pitón, el cocodrilo, y el ante, en una combinación lujosa, sensual, y con mucha personalidad.
En un mundo de la moda en el que parece que todo está inventado, Etxeberría ha encontrado su hueco en piezas caras, pensadas para clientes que aman lo exclusivo y que probablemente sea más fácil encontrar en Nueva York o en Moscú que en Madrid. Sólo la materia prima de las piezas es difícil de conseguir y muy cara, así que el precio final sumará varios miles de euros fácilmente.
La colección tiene un toque exótico, prehistórico, los vestidos sin mangas con largas cremalleras y las chaquetas con bermudas se tiñen en varios colores, se fabrican en varios texturas que se mezclan entre sí para crear un efecto patchwork.
La piel se hace maleable y permite crear plisados y pliegues, redondear las formas y destacar la silueta en la zona de los hombros y cubre hasta los pies en unas caprichosas alpargatas.
El desfile se cerró con una espectacular coraza de cocodrilo verde al más puro estilo Mad Max. El efecto salvaje de la colección se refuerza con el peinado tomahawk de las modelos.