Comenzar a cambiar nuestra alimentación no es sencillo y seguramente muchas de nosotras lo sabemos. Si alguna vez habéis seguido alguna dieta, es más que posible que hayáis escuchado hablar del término cheat meal o comida trampa.
Esa comida una vez a la semana en la que se supone - y solo se supone - que podemos comer un poco lo que queramos. En realidad, esta afirmación tiene matices. Por ello, os vamos a contar en qué consiste exactamente el cheat meal y qué beneficios puede traernos.
En qué consiste la comida trampa
Una de las primeras cosas que debemos tener en cuenta es lo que entendemos como comida trampa. Para empezar, el día que hacemos esta cheat meal no implica que todo el día entero pueda ser de trampa. De hecho, si hacemos trampa todo el día entero, se pierde cualquier beneficio que la cheat meal pueda tener.
Solemos entender que esta comida trampa implica comer cualquier cosa que queramos. La realidad es que lo más recomendable es que se trate de una comida que sea alta en carbohidratos, en vez de ser rica en grasas trans y poco saludables, y que contenga algo de proteínas. Además, es importante que comamos solo la ración con la que nos sintamos saciados, sin pasarnos, ni comer hasta encontrarnos mal.
En qué momento realizar la comida trampa
Otra de las cosas que habitualmente hacemos es realizar esta cheat meal en el fin de semana, porque es cuando salimos o cuando más nos apetece. Sin embargo, para obtener todos los beneficios, lo ideal sería hacerlo un día que vayamos a entrenar. De esta manera, no solo tendremos más energía para el entreno -al ingerir más carbohidratos - sino que nos aseguraremos de quemarlos mejor.
Cómo nos ayuda la cheat meal
Para empezar, se trata de una forma de liberación o de recompensa por el esfuerzo que hemos hecho durante la semana o durante el tiempo que llevamos comiendo de manera saludable. y/o haciendo deporte.
No solo eso, sino que a nivel psicológico puede ayudarnos a que sea más sencillo sobrellevar las tentaciones que se nos presenten en otros momentos. Con las cheat meal es casi como si programáramos estas tentaciones para un día concreto, evitando caer los demás. Esto nos ayuda a ser más disciplinados.
Además, actúa como una recompensa para nosotros, de manera que nos estamos autopremiando por el trabajo bien hecho hasta ese momento. Los beneficios de la cheat meal también son físicos.
Para empezar, se genera cierto aumento en nuestra hormona tiroidea, lo que pone a trabajar más a nuestro metabolismo, de manera que sigamos quemando grasas. Por supuesto, esto solo se da cuando cumplimos con la comida trampa en base a los términos antes indicados.
Además de esto, aumenta la liberación de leptina, lo que hace que nuestro cuerpo se mantenga saciado y, además, facilita que metabolicemos mejor los carbohidratos.
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