El genio que dio vida a la extravagante, cuidada y delicada decoración de la Gala Met 2019 inspirada en el camp no es otro que Raúl Ávila, decorador que ya puso la guinda del pastel a las galas de otros años. Este colombiano, especializado en diseño floral y en la decoración más sofisticada, tiñó de rosa la gala con una decoración que comenzaba con una alfombra plagada de rosas en la que pudimos ver desfilar todos los looks de la noche más extravagante de la moda.
Los flamencos, los reyes del camp
El diseño para la entrada del MET fue una fantasía realizada con cinco flamencos de casi ocho metros de altura, llenos de plumas, sobre 30.000 flores y en cuyo montaje participaron al menos 25 personas. ¿El resultado? Una teatralidad digna de la gala más ambiciosa y extravagante del año.
Para que te hagas una idea del tamaño y del detalle, aquí tienes dos de las fotos hechas en la base de los flamencos.
Una mesa con todo lujo de detalles
Poco (o nada) pudimos ver del interior del MET donde se celebró la cena. Lo que sí sabemos es que la cubertería era de bambú y plata, la vajilla con decoración floral y la cristalería en tonos rosados, a juego con las lámparas de plumas que también decoraron la mesa.
Servilletas de lino blanco con un flamenco bordado y flores silvestres sobre un mantel en color rosa empolvado también de lino. "No había espacio para la simplicidad, incluso cuando se trataba de la mesa", declaró Raúl Ávila a Vogue semanas antes del evento. El menú fue realizado por el catering de Olivier Cheng.
Y el resultado fue mucho más allá de lo esperado, tanto en los looks de las celebrities que asistieron que nos enamoraron con sus estilismos, como en la decoración de una noche llena de arte, moda, glamour y originalidad.
Foto | GTres
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