Quien diga que la tortilla de patatas es un plato facilón que cualquiera puede hacer no se equivoca del todo. Pero como con todo en lo que a gastronomía se refiere, fácil no significa que tenga sus trucos.
Es verdad que en esto de las tortillas se cumple eso de que para gustos, colores. Habrá quien sea team cebolla y quien no (ya nos dejó claro Dabiz Muñoz que la tortilla de patatas no debería llevar cebolla, aunque estamos poco de acuerdo con él en esta ocasión), quien prefiera la tortilla poco cuajada al estilo de Betanzos y quien la prefiera más. Pero sea como sea, la proporción patata/huevo debe ser equilibrada siempre.
Aunque como lover de la tortilla de patatas puedo decir que hasta las malas son bastante buenas, es más fácil de lo que piensas caer en lo peor que puedes hacerle a este manjar: dejar seca la tortilla. Por suerte los expertos de DAP son personas estupendas que nos aclaran todas las dudas sobre la gran pregunta: ¿cuántos huevos tengo que echarle a la tortilla de patatas?
Cuántos huevos hay que echar a la tortilla de patatas
Es posible que si le preguntas a tus abuelas o a tus padres, el ojímetro es el medidor que usen, pero a ellos les avala la experiencia y tienen miles de volteos de tortilla a sus espaldas. Si estás empezando en esto de la cocina, lo mejor es tratar de encontrar el equilibrio usando otros métodos.
Tal y como nos explican en DAP, no existe la proporción perfecta en esta receta porque “el problema es que no todas las patatas ni todos los huevos pesan lo mismo, y también influyen factores como el tipo y edad de la patata, su corte y punto de fritura, el tamaño de la sartén o el punto de cuajado.”
Los ganadores de los concursos de mejor tortilla de patatas no sueltan prenda sobre la proporción y dan más bien consejos sobre el tipo de patata a elegir (siempre nueva o agria) o la manera de cortarla (laminada fina, para lo que es ideal una mandolina).
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Ahora bien, podemos fiarnos de nuestro chef más televisivo y seguir la regla de 6+3+1 de Karlos Arguiñano (seis huevos, tres patatas y una cebolla), o hacer caso a lo que dicen los libros. Por ejemplo Dani García afirma que usar 1 kg de patatas kennebec y unos 8 huevos nos da un resultado perfecto, y David de Jorge usa 1 kg de patatas y 8 huevos, más 150 g de cebolleta. La Taberna Pedraza, que hace la tortilla de patatas al estilo de Betanzos, recomienda 220 g de patata agria ya pelada y cortada y 4 ó 5 huevos.
Ana Cordero por su parte afirma que por cada patata mediana o puñado de patata echemos dos huevos, y si añadimos cebolla, reduzcamos la cantidad de patata.
Los expertos de DAP nos dan su clave: echar los huevos a la patata y no a la inversa. Te explicamos para que quede claro. La idea es comenzar con 600-750 g de patatas sin pelar para una tortilla mediana (4-6 personas) y con unos 6-8 huevos (una proporción de unos 100 g de patata por cada huevo).
Una vez frita la patata batimos los huevos (comenzamos con 6) sin meterles mucho aire y los añadimos a la patata escurrida. De esta forma podrás ajustar la cantidad para que la mezcla esté jugosa y homogénea sin formar un engrudo pero sin que la patata flote. Si necesitas más huevo, añade más.
Un buen truco para que la tortilla de patatas quede a tu gusto, ya sea más o menos cuajada (puedes usar una de estas sartenes dobles para dar la vuelta a la tortilla de patatas fácilmente), siempre esté jugosa y perfecta.
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Fotos |DAP, blackieshoot y Morgane Perraud en Unsplash