La función de la freidora de aire que no conoce casi nadie y te hará la vida más fácil

En cualquier airfryer puedes hacer mucho más que alitas de pollo y patatas fritas, y esta vez el resultado supera con creces al que podrías tener usando el microondas

En casa de mis padres se come pan a diario. La barra de pan, antaño la hogaza en casa de mis abuelos, es un imprescindible en la mesa junto con una ensalada. Siempre hay ambos, se coma lo que se coma y ese hábito lo he heredado yo. Sin embargo vivo sola y comprar una barra de pan todos los días para comer pan reciente, y que luego me sobren dos tercios, no es algo que me guste. Ni económicamente hablando ni desde el punto de vista del desperdicio alimentario. Por eso me gusta tener pan congelado.

Antes, descongelaba el pan en el microondas poniendo un vaso con agua para que no perdiera tanta humedad. Ahora he descubierto una función del airfryer que me hace la vida muchísimo más fácil y con la que podemos descongelar el pan y que quede como recién hecho, cosa que no consigues usando el microondas. No afecta a su textura ni sabor y el pan queda increíble. Te cuento cómo.

Cómo descongelar pan en la freidora de aire o airfryer

Aunque existen algunas airfryer que traen de fábrica un programa de descongelación, no es mi caso. La mía no tienen nada de esto, pero podemos descongelar el pan de forma muy sencilla y siguiendo estos pasos:

  1. Precalienta la freidora de aire a 100ºC durante unos minutos.
  2. Coloca el pan de forma que el aire circule correctamente dentro del cesto de la freidora. Nada de apilarlo ni de colocar unos trozos encima de otros. Debe haber espacio entre los trozos de pan para que el aire caliente se mueva entre ellos.
  3. Vamos a tenerlo a 100º durante unos 10 minutos, aunque ve revisando de vez en cuando. Si son trozos pequeños o panecillos individuales tardará menos que si estás descongelando una hogaza.
  4. A medida que notes que el pan se descongela y se calienta, aumenta la temperatura, pero nunca superes los 180º. Queremos conseguir un exterior crujiente, así que mantén esta temperatura durante al menos un par de minutos.

El pan congelado caduca, así que no te olvides de marcarlo cuando lo guardes con la fecha de envasado, para que no pierda textura y sabor cuando lo descongeles. Lo ideal es no guardarlo más de un mes en el congelador para que conserve todas sus propiedades.

Y cuidado al guardarlo en el congelador, no uses la bolsa de papel en la que lo entregan en algunas panaderías. Es mejor, como nos explicaban los expertos gastronómicos de Directo Al Paladar, trocearlo en rebanadas (o en porciones) y guardarlo en una bolsa de plástico con cierre hermético para ir sacando solo la cantidad que necesitemos.

Fotos | Amazon, Foto de Kate Remmer en Unsplash

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