Los pimientos del piquillo rellenos son muy versátiles a la hora de preparar recetas con ellos, aunque una de las formas más habituales es hacerlos rellenos. En este caso, los haremos con bacalao, que es muy apropiado teniendo la Semana Santa a la vuelta de la esquina. Además, se trata de una receta que congela perfectamente, así que la podéis elaborar unos días antes o hacer de más y dejar ya la comida resuelta para otro día. También podéis dividir el trabajo en dos partes: un día hacer la salsa y, al día siguiente, terminar la receta, así no resulta tan pesada y larga.
En primer lugar, calentamos en una cazuela amplia un poco de aceite de oliva. Rehogamos las cebollas y las zanahorias troceadas hasta que cojan color, añadimos entonces el pan frito y damos unas vueltas. Echamos el vino y subimos un poco el fuego para que se evapore el alcohol. Cubrimos con agua y cocemos durante una hora más o menos.
Después, pasamos la salsa por el pasapurés, ponemos al punto de sal y devolvemos a la cazuela. Si vemos que está muy espesa, podemos agregar un poquito más de agua o caldo de verduras. Cocemos durante 15 minutos más. Retiramos del fuego y reservamos.
En el siguiente paso, desmenuzamos y sacamos las espinas que pueda tener el bacalao. Lo rehogamos en una sartén con un poco de aceite durante unos minutos. Lo escurrimos bien y reservamos mientras hacemos la bechamel. Echamos en una cazuela amplia la mantequilla, cuando se haya disuelto añadimos la harina y con unas varillas removemos y “freímos” un par de minutos para que la harina pierda el sabor a crudo.
Agregamos la leche, poco a poco, a la vez que removemos con viveza para evitar que se formen grumos. Iremos dejando que se consuma la leche antes de añadir otro chorrito. Subimos un poco el fuego y, sin parar de remover, cuando comience a hervir la bechamel, salpimentamos y añadimos nuez moscada al gusto.
Cocinamos durante unos 15 minutos sin dejar de remover en ningún momento para evitar que se pegue. A los 10 minutos, más o menos, antes de terminar de cocinar la masa, agregamos el bacalao y lo mezclamos. Rellenamos los pimientos con esta mezcla, los cerramos con un palillo y los vamos colocando sobre la salsa con cuidado.
Cocemos durante unos 15 minutos el conjunto y servimos bien caliente. Podemos acompañar estos pimientos de bacalao de unas patatas fritas o de algo más ligero, como una buena ensalada mixta, y convertir la receta en plato único.
Pasapurés de acero inoxidable El Corte Inglés
Con qué acompañar los pimientos del piquillo rellenos de bacalao
Los pimientos del piquillo rellenos de bacalao son una comida excelente para cualquier día durante todo el año pero, sobre todo, en Semana Santa. Una vez rellenos se pueden rebozar con harina y huevo pero, para hacerlos un poco más ligeros, el plato lse puede servir así y también están supremos.
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