Comer bien, saludable y rico no siempre es una cuestión de tiempo. Vivimos en la era del fast life en la que la productividad se mide por el número de cosas que eres capaz de hacer durante un día. Pero a pesar de estar metidas de lleno en un ritmo vital frenético, podemos comer bien y rico. No es una quimera, es una realidad.
Estas alubias con langostinos es una receta facilísima que se tarda 15 minutos en hacer y es uno de los guisos más socorridos que tengo en mi recetario. No solo porque está buenísimo, sino porque no necesito ir a la compra para hacerlo porque los ingredientes son un habitual en mi despensa y mi congelador. Está lleno de nutrientes e insisto: es una receta exprés de cuchara que puedes tener lista en 15 minutos.
Cómo hacer unas alubias con langostinos en 15 minutos
Para dos personas solo necesitamos unos 200 gramos de alubias ya cocidas (con el resto del bote que suele ser de 400 gramos puedes hacer una ensalada como estas o un hummus mucho más cremoso), seis langostinos que siempre tengo en el congelador, una cucharada sopera de salsa de tomate, medio diente de ajo, un cuarto de cebolla y caldo de pescado que también suelo tener en el congelador, aunque puedes comprarlo ya hecho.
Comenzamos preparando un sofrito con la cebolla picada fina y el ajo, que sofreímos en una sartén con un poco de aceite. Mientras trabaja el fuego por nosotros, pelamos los langostinos y retiramos el coral de las cabezas apretando con los dedos. Si no quieres hacer este paso, puedes freír las cabezas en el aceite que vas a usar para el sofrito durante un par de mitos, retirando después cáscaras y cabezas y usando ese aceite para la cebolla y el ajo. Reservamos los cuerpos de los langostinos y añadimos la salsa de tomate a la cebolla cuando empiece a estar transparente y dorada. Dejamos que se haga todo junto durante cinco minutos más y añadimos los langostinos y el coral.
Lavamos las alubias mientras los langostinos se cocinan un poco y las añadimos bien escurridas al sofrito. Es el momento de añadir el caldo de pescado hasta cubrirlas, pero sin pasarnos de cantidad porque no van a cocer mucho y nos podrían quedar muy caldosas. Si no tenemos caldo ya preparado (ya sea casero o en brick), podemos hacer uno rápido con una pastilla de concentrado pero créeme que la otra opción es mucho mejor. Dejamos que cueza todo a fuego medio cinco minutos y servimos.
Podemos añadirle un poco de perejil fresco picado fino antes de servir para darle un poco de color, pero tal cuál está es sencillamente delicioso. Tanto que se ha convertido en mi plato de cuchara rápido favorito. Una receta reconfortante perfecta para los días de frío que podemos acompañar de una ensalada verde o simplemente, comernos una fruta de postre para tener una dieta equilibrada y sana.
Fotos | Directo al Paladar
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