Si tienes invitados y necesitas un postre resultón o tienes antojo de un bocado dulce, nada mejor que esta cheesecake de melocotón para disfrutar de un postre muy fácil con el que no hace falta ni encender el horno para tenerlo listo. Solo necesitaremos tiempo sifuciente para dejarla reposar, pues necesita cuajarse en la nevera. También, un molde desmontable de 18 centímetros para facilitar el desmoldado a la hora de servirla. No obstante, si no os gusta el melocotón se puede sustituir perfectamente por otro tipo de fruta de hueso como albaricoque, nectarina o incluso mango o cereza.
Empezamos preparando el puré de melocotón para la mousse y la gelatina de la superficie. Aunque también podemos saltarnos este paso si compramos puré de fruta ya preparado para pastelería. Si no, pelamos y deshuesamos los melocotones, los cortamos en dados y los trituramos con una batidora. Pesamos para destinar una parte, 150 gramos, para la mousse y, por otra, 120 gramos para la gelatina de decoración. Reservamos en la nevera.
Para la base, trituramos las galletas y las unimos a la mantequilla derretida formando una pasta. La extendemos en la base del molde de 18 centímetros, forrada previamente con papel de horno, y aplastamos con un vaso para compactarla. Reservamos, después, en el frigorífico. Por otra parte, cortamos un melocotón en dados y, una vez que la base de galleta haya endurecido, los disponemos por encima.
Kitchen Craft Master Class Molde Redondo Desmontable, Acero, Negro, 18 cm
Para hacer la mousse, mezclamos en un bol el queso crema a temperatura ambiente, el yogur, el azúcar y removemos hasta mezclar bien. En un vaso disolvemos la gelatina en polvo en el agua, dejamos reposar cinco minutos y derretimos al fuego o en el microondas hasta que se vuelva líquida. Le añadimos el puré de melocotón y revovemos suavemente. Agregamos esta mezcla al bol con la mezcla de queso y mezclamos todo bien.
Con una batidora de varillas, montamos la nata y el azúcar para la mousse hasta que esté espumosa (no debe de quedar dura como para decorar, sino ligeramnete semimontada) y con una espátula la añadimos a la mezcla anterior de la mousse. Vertemos con cuidado en el molde y dejamos gelificar durante seis horas.
Batidora amasadora Philips HR3740/00 con función Turbo
Una vez cuajada la mousse, preparamos la gelatina de la superficie. Para ello, en un bol añadimos la gelatina en polvo para la decoración y el agua correspondiente, removemos, dejamos que se hidrate cinco minutos y la derretimos de nuevo al microondas o en un cacito al fuego. Le añadimos el puré de melocotón y el azúcar y, con cuidado, lo vertemos sobre la mousse. Dejamos gelificar dos o tres horas en la nevera.
Para presentarla, ponemos un paño de cocina caliente alrededor del molde durante cinco minutos para que la mousse se separe con facilidad de las paredes del molde. La desmoldamos en el plato donde la queramos presentar y la decoramos con dados de melocotón y frutos rojos, así como unas hojas de menta.
Nota: algunos de los enlaces de este artículo son afiliados y pueden reportar un beneficio a Trendencias
Fotos | Directo al paladar
En Trendencias | La mejor receta de tarta Sacher la tiene Jordi Cruz: así puedes hacerla en casa para dejar a tus invitados con la boca abierta
En Trendencias | Las 15 mejores pastelerías de moda que no debes perderte en Madrid
En Trendencias | 19 postres fáciles y rápidos para Navidad que nadie creerá que hayas hecho a última hora.