Hay recetas familiares que tienen algo especial y el resultado no es ni equiparable a la de un restaurante con estrella Michelin. Lejos de optar por una receta clásica, hoy quiero mostraros una receta familiar de Liliana Fuch (compañera de Directo al paladar) que hacía su padre y ayuda a dormir bien. Con los copos de avena como protagonistas, este ingrediente es perfecto para aquellos días en que no sabemos qué cenar y buscamos algo diferente.
Este ingrediente es de leo más versátil, ofreciéndonos un sinfín de posibilidades y opciones, sin embargo el padre de Liliana la preparaba para cenar y al estilo suizo. Llamada porridge de avena, esta receta cada vez tiene más fans. Haciéndose a ojo, calentaremos leche a fuego lento y añadiremos un par de cucharadas de copos de avena finos por persona. Removeremos suavemente con una cuchara de madera hasta que la mezcle se espese, corrigiendo el nivel de leche sobre la marcha.
Aunque los más golosos pueden añadir un poco de azúcar moreno o miel por el camino, siempre podemos endulzar la mezcla con trozos de manzana cocidos en la leche o con compota con un poco de canela.
La mejor parte de esta receta de porridge de avena es la facilidad de elaboración (al gusto de cada uno). Sin seguir las cantidades exactas, podemos dejarlo más o menos espeso y agregar otras frutas -o frutas secas-, usar una bebida vegetal, ponerle semillas para toques crujientes, y así un largo etcétera. Incluso podemos crear una cena sana pero indulgente.
Esta receta es rica en fibra y saciante, además, gracias al triptófano natural la mezcla nos ayudará a conciliar mejor el sueño. Si acompañamos la mezcla con alimentos ricos en magnesio (nueces y plátano, por ejemplo) hará que la receta sea más digestiva y nos ayude a dormir aún mejor.
Fotos | Marta Dzedyshko, Directo al paladar
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