Si hace tiempo estás en planes de perder los kilos de más y todo iba muy bien hasta que la báscula dejo de moverse, quizá estés ante un estancamiento en tus planes de adelgazar, por ello, hoy te dejamos algunos consejos para ayudarte a superar la meseta y continuar perdiendo peso.
¿Por qué se produce la meseta en la pérdida de peso?
Si tu pérdida de peso se ha detenido, te encuentras ante una meseta, fenómeno frecuente que se produce en medio de los procesos de adelgazamiento y que es originado por diferentes causas, las cuales debemos conocer para ponerle fin a este freno y continuar perdiendo peso.
Entre las causas de una meseta en la pérdida de peso podemos encontrar aquellas más frecuentes como la mayor flexibilidad en nuestras ingestas y el consecuente aumento de las calorías ingeridas que no nos permiten lograr el balance energético negativo que necesitamos para adelgazar.
Después de un tiempo "cuidándonos" es frecuente aburrirse, cansarse o relajarse, y autopermitirnos comer un poco más, lo cual puede socavar nuestro intento de adelgazar.
Asimismo, dependiendo de los recursos usados para adelgazar, podemos sufrir un enlentecimiento de nuestro metabolismo, lo que nos lleva a ahorrar calorías, gastar menos y no perder peso con lo que comemos.
Aunque las causas más frecuentes se encuentran dentro de las primeras, es decir, de aquellas que podemos solucionar, siempre conviene alejarse de recursos milagrosos para perder peso, porque reducen nuestro metabolismo produciendo la tan temida meseta y también, el odiado efecto rebote.
Cómo revertir la meseta y continuar adelgazando
Si por alguna razón te has detenido en tu proceso de adelgazamiento y estás en medio de una meseta, te aconsejamos tener en cuenta lo siguiente para revertir este fenómeno y continuar adelgazando:
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Registrar lo consumido cada día y las cantidades, de manera de tomar conciencia si hemos estado comiendo demás y si debemos hacer algunos ajustes. En Vitónica ya nos han contado cómo hacer un registro diario de lo ingerido. No olvides anotar también lo que bebes y sus cantidades.
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Supervisa tu descanso, pues el estrés y el incorrecto descanso pueden estar afectando tu dieta, mientras que si descansas bien rindes más y puedes hacer todos los ajustes pertinentes tanto en dieta como en entrenamiento.
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Dale un nuevo look a tu dieta y prueba nuevos platos aun utilizando los mismos alimentos. Ello te motivará a seguir esforzándote en el cuidado de tu dieta.
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Ajusta las porciones que consumes y verás que muchas veces un poco más en cada ingesta suma para que al final del día, tu balance calórico no sea negativo. Si ajustas tus porciones en cada comida, quizá puedas revertir la meseta y lograr que la báscula vuelva a mostrar resultados.
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No saltes comidas y fracciona más tu dieta diaria, pues de esta forma, mantendrás ocupado tu cuerpo, activarás el metabolismo y no acumularás hambre que resulta fatal si quieres cuidar cuánto comes y qué comes.
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Cambia tu entrenamiento incorporando más tiempo o variando tu actividad habitual, de manera de sorprender a tu cuerpo, exigirle más trabajo y también, activar el metabolismo para ayudar a superar la meseta.
Con estos consejos incorporados a tu vida, puedes superar la meseta y continuar perdiendo peso para cumplir tu objetivo de deshacerte de los kilos de más.
Recuerda que la meseta puede ser muy frustrante, entonces, no te desanimes y piensa que es algo frecuente a lo cual podemos enfrentar exitosamente e incluso superar para lograr lo planeado.
Nunca abandones la dieta y tus cuidados si la báscula no se mueve, sino ponte más en acción que nunca para alcanzar tus objetivos.
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