A nuestra compañera Mosky no le gustan la patillas y lo que me pude reír cuando comentó que le recuerdan a Curro Jiménez. Pero hemos de admitir que es una moda con grandes seguidores, que permite expresarte y dar un toque diferente a tu estilo.
Y es que las patillas tienen una larga historia y embajadores tan variopintos que van desde el rey del rock pasando por personajes tan cinematográficos como Lobezno (Xmen), Denny Succo o bien Javier Cámara, el cantante Fito o el modelo Jon Kortajarena. Otros célebres fans de las patillas fueron el poeta Henrik Ibsen, o Francisco José I de Liechestein
Las patillas tienen su origen en la época victoriana y eran un símbolo ultraconservador. Se acostumbraban a llegar como una prolongación de la barba y a veces se unía al bigote. Después esta moda saltó a Japón y creó furor.
De nuevo volvieron a popularizarse en las décadas de los 60 y los 70, donde Elvis fue uno de sus máximos representantes. Rockeros y jóvenes se aficionaron a este estilo, en los que eran una muestra de rebeldía.
Las patillas también están rodeadas de curiosidades y anécdotas. Por ejemplo, en algunas zonas de Estados Unidos y Australia, las que acaban en punta se convirtieron en un símbolo de los clubs gays. En Méjico, determinados indígenas afeitan toda su cabeza y se dejan unas patillas larguísimas. ¿Originales, verdad?
Vía | Wikipedia En Mensencia | Las patillas y Curro Jiménez