La pintura de Mark Rothko se ha convertido en la obra de arte contemporánea más cara vendida en una subasta. Ya que, finalmente, la pintura titulada "Centro Blanco" se vendió por casi 54 millones de euros.
En un principio, se estimaba que el precio del cuadro llegaría a los 29 millones de euros según dijo la casa de subastas Sotherby's pero, finalmente, llegó a los 54 millones.
El hecho de haber pasado por pocas manos desde su creación en el 1950 ha creado un interés mayor entre los pujadores. Rockefeller, su anterior propietario, lo compró en una galería por 6000€ y desde entonces, lo tuvo en su oficina de Nueva York.
Vía | Art Neutre