La recién celebrada NY Fashion Week contó con una modelo de excepción, Crystal Renn, quien salvo en las aclamadas apariciones recientes en campañas como la de Gaultier nunca había paseado palmito en desfiles salvo los tamaño XXL.
La noticia se acogió con gozo y algarabía, con una Crystal exultante por participar en el desfile de Zac Posen, aunque seamos sinceros, con varios kilos y sonrisa de menos.
Todos teníamos puestos en ella la esperanza en un sutil giro hacia un nuevo modelo de mujer en moda, pero parece que no ha sido más que una anécdota.
A ello Milán, se le ha unido con una prohibición del todo insultante.
Como quizás ya haya llegado a vuestros ratones, la pasarela milanesa ha vetado su participación a la diseñadora Elena Miró, adalid de la moda en tallas abundantes y para quien Crystal ha desfilado en numerosas ocasiones.
La noticia no ha salido indemne de la polémica, con una Elena absolutamente indignada. Por vez primera en cinco años la firma queda fuera por considerar que “no da la adecuada imagen de la moda italiana”.
Pues señores, de toda la vida he considerado a Elena Miró tan italiana y avanzada en un nuevo concepto de moda, como a Miuccia Prada en su terreno.
¿Y cuál es esa imagen? Pensemos siempre que la moda ha de tener un objetivo, embellecer siempre a la mujer real, y las mujeres reales se acercan más a Crystal que a Kate Moss.
Fotos | Style, Harpers Bazaar
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