Hillary Rodham Clinton ha anunciado, oficialmente, que se presentará a las elecciones a la presidencia de los Estados Unidos - con el beneplácito expreso de su colega de partido Barak Obama, actual presidente de uno de los países más poderosos del planeta -, como así lo manifestó durante unas declaraciones que hizo para la televisión. Es la segunda vez que esta antigua First Lady prepara su campaña presidencial.
Desde que dimitió de su puesto como Secretaria de Estado, Hillary dedicó esos meses transcurridos desde entonces a escribir sus memorias. Un libro al que tituló "Tiempo de decisiones, 2008-2013", que fue publicado por la editorial Fayard. También actúa como ponente cuando la invitan, embolsándose cada vez que eso ocurre la módica cantidad de 150.000 euros.
Si algo ha caracterizado a Hillary ha sido siempre su discreción. Incluso en los momentos más complicados de su vida esta mujer siempre ha sido de las que prefieren contar hasta diez antes de precipitarse y hacer declaraciones de las que luego pueda arrepentirse. Cuestión de dejar que las cosas se enfríen, y de poder tener una cierta perspectiva que le permita no dar pasos en falso. No olvidemos nunca que la ex Primera Dama dirigió la política extranjera de los Estados Unidos desde el 2009 al 2013.
Así ocurrió cuando todo aquel asunto de la becaria Monica Lewinsky que hizo correr ríos de tinta; también cuando muchos republicanos ultra conservadores y de derechas se dedicaron a ir diciendo por ahí que finalmente no se presentaría a las elecciones pues estaba gravemente enferma (insinuaron que tenía un cáncer en el cerebro).
Normal que desconfíe de la prensa y de los medios de comunicación en general, ya que la situación económica de la prensa escrita la lleva a ser cada día más sensacionalista, pero si quiere ganar las presidenciales Hillary Rodham tendrá que hacer un esfuerzo y vencer su desconfianza.
Hillary nunca ha renunciado a su apellido de soltera, y cuando su marido se convirtió en gobernador de Arkansas siguió ejerciendo como abogada en el bufete Little Rock. A pesar de las continuas infidelidades de su marido, Hillary decidió que la mejor estrategia contra los continuos ataques de la prensa y de sus detractores era hacer un frente común, solidarizándose con su marido de quien no ha creído conveniente divorciarse. Quizá lo que más sorprendió de esta First Lady fue el que considerara su rol como si se tratase de un empleo.
Cuando lo del affaire Levinsky, Hillary hizo unas declaraciones asegurando que seguía a su lado porque lo quería, lo respetaba, y por todo lo que había vivido y conseguido juntos, y que si eso no bastaba, pues que la gente dejara de votarlo.
Quienes conocen bien a Hillary coinciden todos en afirmar que las personas más cercanas a ellas se empeñan en levantar barreras para protegerla al máximo porque eso es lo que ella desea, pero que esto es sólo oportuno cuando se está en lo más alto. Para ganar las presidenciales tiene que mostrarse más cercana y humilde. Sin embargo, la nueva candidata a la presidencia ha mandado constituir un equipo formado por veinte personas que se dedicará a responder a los ataques de los conservadores y de los republicados contra los candidatos demócratas que se presentan a las elecciones del 2016.
La revolución Schake
Para ayudarle a mejorar su imagen pública, Hillary ha contratado a Kristina Schake (45 años) quien también ayudó a Michelle Obama a seducir a los americanos. Ella fue quien animó a Michelle a aparecer en portada de la revista Vogue, a bailar con el rey de la tele Jimmy Fallon frente a miles de internautas para sensibilizar a la gente en lo relacionado con la obsesidad infantil.
También la animó a acudir a los Oscars - aunque fuese virtualmente -, para entregar el premio a la mejor película en compañía de Jack Nicholson en febrero de 2013, y hasta en intervenir en una de las emisiones del programa de cocina Master Chef, convirtiéndola así en una mujer accesible, comprometida y fuerte.
Antes de trabajar para Michelle Obama, Kristina lo hizo para María Shriver que por aquel entonces estaba casada con el gobernador de California, Arnold Schwarzenegger. Kristina Shake es capaz de transformar a las políticas que parecen distantes y alejadas de las preocupaciones de los ciudadanos en mujeres accesibles con problemas e inquietudes iguales a las de todo el mundo.
En el 2008 Hillary perdió las presidenciales por haber basado toda su campaña en la fuerza y en la autoridad. Esta semana, gracias a Kristina, Hillary se presentó ante la prensa más relajada que nunca declarando que se había cortado el pelo y que era una nueva mujer. También ha instalado sus oficinas en Brooklyn, el barrio más poblado de Nueva York y uno de los más diversificados que se ha convertido en el paraíso de los hipsters, por lo que se ha ido aburguesando paulatinamente. Cuestión de estar más cerca de la gente, y ha permitido que su hija Chelsea Clinton apareciese posando en portada del número de mayo de la edición americana de la revista ELLE. ¡Por algo se empieza!
A principios de este mes de marzo, Kristina Schake ha sido nombrada Directora de Comunicación de L'Oréal USA Professional Products Division. Su misión consistirá en transformar la industria de la belleza profesional para que se convierta en la solución de todas esas necesidades de belleza del mundo. "Beauty For All" será el claim de la nueva campaña en la que también ha participado Peter Lindbergh realizando un espectacular corto. ¡Casi nada!
Kristina compaginará esta importante tarea con la de asesora de Hillary. Desde su nuevo puesto no ha dudado en hacer públicos los consejos que en su día le dio a Michelle Obama. Estos son los siguientes:
Lecciones de estilo desde la Casa Blanca
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Todos somos diferentes, y todos somos iguales. Todos tenemos los mismos sueños, esperanzas y valores.
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Escuchar más que hablar. Es importante escuchar los deseos y las necesidades de la gente, para empatizar y conectar con ellos. Cuando realmente te preocupas y te ocupas de los problemas de la gente suelen dar lo mejor de sí mismos.
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Cuando elijas una causa, elige una que de verdad te importe. Céntrate en ella. Si lo que haces por tu comunidad es un reflejo de tus pasiones y de tus valores, serás mucho más efectivo.
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Se tú mismo. No hay nada más efectivo que ver a alguien que es realmente auténtico, eso causa una gran impacto en los demás. Si de verdad te importa la gente, interactuar con ellos te llenará de energía.
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Que no te asuste el fracaso. Cuando uno se siente en confianza resulta mucho más creativo. Además, siempre se puede aprender algo del fracaso.
Hillary es respetada por su inteligencia, y tanto ella como su marido han sabido resistir bien a los diferentes ataques a los que se han visto sometidos a lo largo de su carrera política, y a más de un escándalo. A los candidatos a las presidenciales habría que juzgarles por sus logros, y a Hillary Rodham Clinton los americanos deben agradecerle las mejoras conseguidas en la sanidad pública, y el celo que puso a la hora de proteger sus embajadas repartidas por todo el mundo.
Parece que todo va por buen camino ya que después de un sondeo realizado por el Instituto Gallup, Hillary Clinton y Oprah Winfrey son las mujeres más admiradas por los americanos. Igual nos llevamos todos una sorpresa y Hillary Rodham acaba convirtiéndose en la primera mujer presidente de los Estados Unidos de América, ¡y tenemos 2 Clinton por el precio de uno!
Fotos | Facebook Hillary Clinton
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