La ola de calor afecta a muchas comunidades autónomas de nuestro país y el querer vestir con una sola camiseta oversize se convierte en la salida más práctica (o así lo dictamina el street style). Ir a la playa -o a la piscina- es una de las decisiones más apropiadas a día de hoy y el querer desprender estilo a todas horas es el objetivo de toda fashionista (incluso a sabiendas que se embadurnará de arena). Hoy os mostramos cinco looks que demuestran que la ropa de playa puede ser cool y nos puede acompañar las 24/7.
Un kimono a modo de vestido
El kimono es una pieza imprescindible cuando se trata de ir a la playa y su versatilidad es la responsable: puede convertirse en la chaqueta perfecta, el vestido idóneo y hasta el mejor acompañante para ensalzar el bikini.
El bañador puede servirte como body
Sacar el mayor partido a nuestro armario es el objetivo de muchas fashion victims y convertir un bañador en body es una modalidad que muchas ya han puesto de moda. Esta prenda se convierte en imprescindible en verano: con tu diseño favorito junto a una minifalda/short tendremos un outfit perfecto.
Las prendas de calle se pueden adaptar a la playa
No hay una normativa que diga qué ropa es de playa y cuál no. Las prendas básicas pueden ser perfectas para todas las ocasiones y Julie Sariñana nos lo demuestra con este estilismo playero a base de camisa blanca y short estampado.
La parte de arriba del bikini puede servir de cropped top
Si el bañador puede ser el body perfecto del verano, la parte de arriba del bikini puede convertirse en el cropped top idóneo. Gilda Ambrosio nos lo demuestra con este estilismo de short calado y camisa hawaiana abierta.
Un pareo a modo de vestido
He aquí una de las prendas más versátiles que existen en el mundo de la moda: el pareo. Con gracia y astucia éste puede convertirse en la falda idónea, el vestido más cómodo del momento o hasta el top más cool de todo tu armario.
¿Con cuál de estas opciones te quedas?
Fotos | Instagram @mariejedig
