El truco de Hemingway para aumentar tu productividad por las mañanas y evitar la procrastinación

Era un viejo que pescaba solo en un bote en el Gulf Stream y hacía ochenta y cuatro días que no cogía un pez. Así comienza la célebre novela de Ernest Hemingway llamada El viejo y el mar. Y la verdad es que ese viejo del libro no parece que practica la procrastinación a pesar de que hacía mucho que su trabajo no tenía resultados.

Ser productivos es en muchas ocasiones un auténtico reto, también para figuras tan conocidas y exitosas como Hemingway que a priori daba un aspecto bohemio que en realidad escondía una excelente productividad que avalan 16 libros y un Premio Nobel. Son precisamente estas personas que logran vencer a la pereza las que pueden darnos los mejores consejos para aumentar nuestra productividad.

Hoy te contamos qué hacía Hemingway para aumentar su productividad por las mañanas y evitar la procrastinación, para que puedas aplicarlo en tu día a día y conseguir tus objetivos.

El truco de Hemingway para aumentar tu productividad por las mañanas

Ernest Hemingway dio una entrevista en 1935 a Esquire en la que explicaba el secreto de su productividad: "La mejor manera es siempre parar cuando te va bien y cuando sabes lo que sucederá a continuación. Si haces eso todos los días cuando estás escribiendo una novela, nunca te quedarás estancado". Así, su método de detenerse cuando todavía tienes mucho impulso se convertía en el truco infalible para aumentar su productividad escribiendo.

La ciencia ha estudiado si funciona y los resultados, al menos según este artículo de BBC Worklife, es que sí. De hecho es un truco recurrente que usan los expertos y que sirve para eliminar una de las mayores barreras para la productividad matutina porque cuando retomemos la tarea al día siguiente, el punto de partida será más fácil. Como si cogiéramos una pista rápida para despegar al haber dejado el trabajo en alto el día anterior.

Si haces caso a Hemingway, la próxima vez que tengas un buen ritmo de trabajo en un proyecto hacia el final del día, no sigas. Para cuando aún tienes ideas y energía porque aunque pueda parecer antinatural, mejoraremos nuestra producción para el día siguiente y cogeremos antes el ritmo. Palabrita de escritor de éxito.

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Fotos | Carl Heyerdahl, Matt Ragland y Cathryn Lavery en Unsplash

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