La ciencia nos revela las características que tienen en común las personas solitarias para que podamos identificarlas y ayudarlas si lo necesitan
Según datos del estudio El coste de la soledad no deseada en España realizado por SoledadES (el observatorio creado por Fundación ONCE), los jóvenes de entre 16 y 26 años son los que más solos se sienten en España. Hay más datos, y es que el 25% de la población se siente sola aún estando acompañada según el informe de soledad no deseada de la Fundación Alares.
Esa soledad tiene efectos sobre el cerebro y su procesamiento. De hecho la neurociencia explica que ese efecto que la soledad tiene en nosotros no es solo en cómo procesamos la información, también influye en nuestra salud mental y hay incluso cambios a nivel fisiológico.
Varias investigaciones han concluido que las personas introvertidas tienen más probabilidades de sufrir la soledad que los extrovertidos, pero cualquiera podemos vernos en la situación. La soledad se asocia tanto a condiciones de salud física como a problemas de salud mental, pero todos podemos sentirnos solos en algún momento de nuestras vidas.
Aunque en ocasiones se trata de una soledad elegida, hay otras veces en que es una soledad impuesta. En el segundo caso, hay ciertos rasgos que las personas que se sienten solas comparten, y que podemos identificar en otros. Así podremos ayudarles si lo necesitan.
Tienen una forma única de ver el mundo
Según este estudio publicado en Psychological Science, las personas solitarias tienen una visión diferente del mundo. Tal y como explica la autora principal, la psicóloga Elisa Baek, "las personas solitarias son excepcionalmente diferentes en la forma en que procesan el mundo que los rodea, incluso teniendo en cuenta la cantidad de amigos que tienen" y añadió que existe "una posibilidad es que las personas solitarias no encuentren valor en los mismos aspectos de las situaciones o escenas que sus compañeros".
Se sienten incomprendidos
Siguiendo con el estudio anterior, Baek afirma que “las personas solitarias procesan el mundo de forma idiosincrásica” lo que provoca que se sientan incomprendidos y aún más solos. Cuando nos sentimos incomprendidos, estamos más expuestos a la soledad aunque físicamente no estemos solos.
Esto es algo que tiene que ver con las relaciones con otras personas y con la calidad de las mismas, ya que al no compartir esos valores o no tener tantas cosas en común con otros como decíamos anteriormente.
Ocultan sus sentimientos
Volvemos a un estudio para explicar este punto, porque según la Universidad de Harvard en más del 50% de los casos (concretamente en el 52,2%) la soledad podría deberse a ciertas "estrategias de regulación de las emociones" que no son útiles. Además, el estudio descubrió que las personas con los niveles más altos de soledad tendían a ocultar sus sentimientos y suprimir su expresión emocional.
Aunque a todos nos cueste en ocasiones expresar lo que sentimos, a las personas solitarias les cuesta aún más, lo que provoca que se produzca una paradoja, porque las personas que no eligen la soledad, anhelan las conexiones sociales, pero al mismo tiempo, responden a las llamadas emociones negativas suprimiendo su expresión y evitando activamente el contacto social.
Les cuesta aceptar ayuda
Esa misma investigación de la Universidad de Harvard descubrió que las personas solitarias rechazan el apoyo social. No es que no lo necesiten, es que su respuesta a la soledad es alejarse, no pedir ayuda.
Existe la falsa creencia de pensar que pedir ayuda es un signo de debilidad y a menudo se nos olvida que el dolor es inherente al ser humano, y buscar acompañamiento es un acto de valentía que requiere responsabilizarte de tu propio bienestar emocional.
Caen en sobrepensar
Entre esas "estrategias de regulación de las emociones" de las que hablábamos, y que no sirven para más que martirizarnos, nos encontramos con sobrepensar. Esta tendencia a rumiarlas cosas una y otra vez que en ocasiones llega a paralizarnos, es una de las estrategias inútiles de las que habla el estudio que te hemos mencionado anteriormente, y puede ser un signo más de soledad
Tienen ansiedad social
El trastorno de ansiedad social es un temor intenso y persistente a ser observado y juzgado por los demás y va más allá de la timidez, tal y como explican en Mental Health. Cuando sufrimos este trastorno, nos resulta muy complicado formar vínculos sociales fuertes y eso termina derivando en una mayor soledad.
Les falta conciencia de sí mismos
La autoconciencia es una habilidad de la que ya te hablamos y que está relacionada con la inteligencia emocional. Está íntimamente relacionada con nuestra capacidad para crear conexiones con otras personas, porque cuanto más podemos comprendernos a nosotros mismos, más conscientes somos de nuestro impacto en los demás, y nos ayuda a comprender mejor las emociones de otras personas y a ser sensibles a ellos utilizando la responsabilidad afectiva.
Si esta conciencia de nuestra propia persona no existe, y no somos capaces de reconocer nuestros propios pensamientos, sentimientos, creencias, expectativas, deseos y necesidades, no sólo nos desvinculamos de otros, también de nosotros mismos.
Les cuesta ser asertivos
No es algo exclusivo de las personas que se sienten solas. La asertividad sigue siendo la asignatura pendiente para muchos. En ocasiones, comunicarnos con técnicas pasivo-agresivas puede ser un indicativo de soledad.
Se enfadan mucho
La irritabilidad como respuesta negativa al entorno tanto externo como interno, también estaría relacionado con la soledad no elegida. Las personas que se sienten solas, suelen estar de mal humor, se enfadan mucho y tienen tendencia a quejarse por todo, como los vampiros emocionales en el trabajo.
Tienen una actitud negativa
Tal y como explican en Psychology Today, “los individuos más solitarios eran menos propensos a utilizar la estrategia de reevaluación cognitiva, que es la estrategia de dar un significado positivo a un evento estresante o perturbador. Un ejemplo de reevaluación cognitiva es ver un suceso desagradable como una importante lección de vida o una oportunidad para aprender a ser más fuerte y resiliente”.
En la investigación de la Universidad de Harvard que te comentábamos antes, se observa que las personas solitarias tienen la costumbre de insistir en las malas experiencias y centrarse en ellas, viendo el fracaso solo como un fracaso y no como la oportunidad de crecer.
Fotos | Bridget Jones y Bridget Jones Baby
En Trendencias | Volver con tu ex años después: lo que opinan los expertos sobre las segundas partes
Ver todos los comentarios en https://www.trendencias.com
VER 0 Comentario