Súmate a la tendencia deportiva del momento aplicando esta sencilla técnica en tus entrenamientos
Existen dos tipos de personas, las que salen a correr y las que no consiguen nunca animarse a una sesión de running. Si eres de las segundas, puede que incluso, alguna que otra vez, hayas intentado hacer una sesión de cardio a base de una buena carrera, aunque casi siempre acaban todas igual, cansándote antes de cumplir los objetivos de tiempo y distancia que te habías propuesto. Si te ocurre esto, es seguramente porque estás siguiendo una mala técnica, y es que existe un método para correr sin desfallecer en el intento.
Estamos hablando del run walk, también conocido como Jeffing, Ca-Co o Galloway, una técnica a la que se la han puesto hasta cuatro nombres y con la que todo el mundo parece atreverse, ¿su triunfo? que es apta tanto para principiantes como deportistas expertos. Aquí nos centramos en la resistencia por encima de la velocidad, ya que consiste en correr en intervalos cronometrados, intercalando el running con la caminata para establecer periodos de recuperación activa sin dejar de andar, después de la carrera, conformando una sesión de unos 20 minutos.
Si eres principiante en esto del running, lo ideal es que empieces desde el nivel más bajo, donde el tiempo de caminata tiende a ser el doble o más del que dedicamos a la carrera. Una vez que vayamos avanzando y mejorando, podemos ir poco a poco equilibrando la balanza e, incluso, hacer más minutos de carrera que de marcha. Y es que la ciencia ya ha notificado como el rendimiento de los corredores más novatos podría ascender notablemente poniendo en marcha este método.
Más allá de ser una opción excelente para principiantes, este método es perfecto también para los corredores de maratones, puesto que se trata de una técnica con la que se provocarían menos dolores musculares y fatiga durante las sesiones de ejercicio prolongado, según explican los estudios científicos.
Los distintos niveles del método run-walk
Dentro de esta técnica existen diferentes fases, según podemos observar en la web oficial del run-walk. Para decantarnos por una u otra es esencial saber cual es nuestra condición física y nuestro nivel de resistencia y así elegir un nivel más light o uno un tanto más exigente.
- Fase 1, run-walk: se trata del nivel de inicio, por el que deben empezar aquellos que no están demasiado familiarizados con el running. Consiste en correr durante de 30 segundos y hacer de 1 a 2 minutos de caminata.
- Fase 2, run-walk 1:3: es el nivel perfecto para aquellos que están en forma y quieren aumentar la dificultad de sus entrenamientos para notar resultados más evidentes. Aquí los intervalos de carrera suelen durar 45 segundos y son seguidos de una caminata que oscila entre los 90 segundos.
- Fase 3, run-walk 1:1: aquí ambos intervalos duran los mismo, un minuto de running y uno de marcha. Una opción más demandante a nivel físico que la anterior, pero con la que conseguirás mejorar tu resistencia sin agotarte.
- Fase 4, run-walk 2:1: este es el nivel más complicado de la famosa técnica. consiste en hacer intervalos de carrera que sean el doble de largos que los de la caminata. Básicamente, hacer la fase 1, pero de forma contraria. Aquí si decides correr dos minutos, la caminata a continuación sería de un minuto.
Es importante escuchar a nuestro cuerpo mientras hacemos ejercicio. Por ello si has decidido empezar con un nivel más complicado del método run-walk y notas esa sensación de agotamiento, es mejor que optes por un nivel más bajo y poco a poco, a base de práctica, puedas ir subiendo la dificultad de las sesiones. Yo, como persona que ha esquivado el running durante más de dos décadas, empezaré por la fase principiante.
Fotos| KoolShooters en Pexels, Andrea Piacquadio en Pexels
En Trendencias | Cómo conseguir un six pack de escándalo en poco tiempo
Ver todos los comentarios en https://www.trendencias.com
VER 0 Comentario