Hace unos días salieron a la luz unas ilustraciones que defendían la soltería. Ilustraciones preciosas, porque no hay nada más bonito que ver retratada a una mujer independiente, autosuficiente y en paz consigo misma que nunca se aburre y siempre tiene algo que hacer.
Hasta aquí bien.
Las ilustraciones provocaron reacciones varias: algunas se quejaron de que la protagonista no tiene un cuerpo real (buff), otros se indignaron “¿es obligatorio fumar estando soltera?”(otro buff), también percataron que las solteras leen más que las emparejadas (ay, qué pereza). Pero nadie se quejó de lo esencial: ¿acaso la mujer en pareja no es independiente?
Las ilustraciones se han hecho virales. Suele pasar: el muro de Facebook de las personas es el reflejo de algo que les gustaría ser, no de lo que son. Los artículos compartidos como “El peligro de salir con una buena amante”, “Cosas que debes saber de las mujeres independientes” o “Escorpio: el signo más pasional del zodiaco” son una manera “humilde” de presumir de ser una buena amante, una mujer independiente y pasional. Y, en gran parte, suele ser mentira. Los enlaces compartidos son una herramienta que nos ayuda a crear una imagen online. Nada más.
Desgraciadamente, aquellas ilustraciones sobre la soltería no fueron una excepción. Millones de chicas que se sienten solas las colgaron en su muro a modo defensa, acompañándolas de las frases como “Soy soltera y sigo viva”, “No tengo pareja y es lo mejor que podría haberme pasado” o “Las solteras somos más felices que nadie”.
Mis “amigas” de Facebook formaron parte de este movimiento absurdo. Y lo llamo absurdo porque cuando de verdad no tienes un problema con algo, simplemente no hablas de ello. Y dividir a las mujeres en solteras y emparejadas, insinuando que unas son más independientes que otras, es atreverse a decir que estar en pareja te quita personalidad. Lo peor del asunto es que las que más seguras están de que esto es así son normalmente las que más sueñan con estar en pareja.
Estar soltera no te hace más independiente. Estar en pareja no tiene nada que ver con renunciar a tus ratos libres. Estar soltera no significa no estar satisfecha sexualmente y estar en pareja no garantiza ser amada. Tener novio no te hace más atractiva, pero estar soltera tampoco. Reivindicar la soltería solo significa una cosa: y es que seguimos viendo estar sola como algo antinatural.
¿De verdad todavía estamos en estos rollos?
Y es que me da la sensación de que, a veces, luchando por unas cosas acabamos despreciando otras (queriendo o sin querer). Si seguimos por ese camino, me temo que de aquí a diez años estar delgada y tener pareja será una auténtica vergüenza.
(Por cierto, tengo talla 40 y estoy soltera. Por si las moscas.)
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