Aunque muchos son hacia ti, hay que fijarse también en cómo se comporta una persona en otras relaciones para saber si es excelente
Durante mucho tiempo creí que estaba con una buena pareja. Lo malo es que hay veces que no es oro todo lo que reluce, las relaciones pueden ser complicadas y no siempre es fácil saber si estás con alguien que es realmente una buena persona. La psicología sugiere su carácter, sus valores y cómo te trata son la clave. Por suerte existen ciertos comportamientos que distinguen a una buena persona del resto, y ahora sí los conozco. Y aunque no estaba con alguien que lo era, verlo con perspectiva me hizo darme cuenta de lo que quiero, y de lo que ahora sí tengo en mi relación de pareja. Una buena persona.
No teme disculparse
Quién no haya cometido nunca un error en su vida, que tire la primera piedra. Todos, absolutamente todos, nos equivocamos, y la diferencia entre alguien con una buena inteligencia emocional y alguien que la tiene es lo que hacemos cuando descubrimos que nos hemos equivocado: pedir perdón. Una buena persona es capaz de reconocer sus errores, responsabilizarse de ellos y disculparse de forma sincera. Según la oradora Cherie Carter-Scott, "la ira te hace más pequeño, mientras que el perdón te obliga a crecer más allá de lo que eras". Una buena persona lo sabe y lo practica.
Como explica la psicóloga y terapeuta de parejas María Esclapez en su libro ‘Me quiero, te quiero’, que existe perdón en una relación es un síntoma de la salud de esta. La experta asegura que pedir perdón “siempre que la otra persona se sienta molesta, independientemente de si consideráis que la otra persona tiene razón o no” es un síntoma de empatía y de que “entendéis que percibís las cosas de manera diferente”.
Valora tu perspectiva y no te juzga
Piensa en cómo interactúa tu pareja cuando hablas. Más allá de asentir al oírte, alguien bueno te escucha activamente y responde a tus sentimientos e ideas de manera reflexiva. Respeta tus opiniones aunque no esté de acuerdo con ellas porque entiende que tu perspectiva es tan válida como la suya y usa la empatía para conectar contigo.
El psicólogo Marshall Rosenberg afirmaba que “Cada crítica, juicio, diagnóstico y expresión de enojo es la expresión trágica de una necesidad insatisfecha”. Cuando evitamos el juicio y nos preocupamos por la perspectiva del otro, somos capaces de crear una conexión más sincera en la que todos podemos expresarnos libremente y sin miedo.
Es amable sin importar quién mire
La psicología positiva ha estudiado mucho el impacto de la amabilidad en otros y cómo afecta a nuestro bienestar. Es más, ser amable influye directamente en nuestra felicidad. Y también en la de nuestra pareja. Según el Dr. Stan Hyman, psicoterapeuta, la amabilidad tiene el poder de cambiar el curso de una relación que se ha vuelto indiferente porque “ejercer la bondad construye vínculos y promueve la conexión emocional.” En la pareja, la amabilidad es un elemento importante que refuerza el vínculo creado.
Pero esta vez no te hablo solo de que sea amable contigo. Si estás con una persona que solo es amable cuando otros la miran, ahí no es. Si estás con una persona que solo es amable para conseguir algo, ahí no es. Si estás con alguien que es amable para que otros vean que lo es, ahí no es. Alguien que es genuinamente buena persona siempre es amable con todos. Con el cajero del Mercadona, con esa persona que llama para venderle algo, con el vecino, con tu familia, con sus ex. La verdadera bondad está entretejida en el carácter y aparece incluso cuando no hay nadie alrededor para aplaudirla.
Tiene empatía
Iria Reguera, psicóloga y directora de Trendencias, asegura que “la empatía se trata de la capacidad que tenemos para entender los sentimientos y las emociones de las otras personas. Esto no implica que tengamos que estar de acuerdo con ellas o pensar igual.” Según el psicólogo Alfred Alder, la empatía es una cualidad excepcional imprescindible para cultivar relaciones saludables.
Estar con esa persona no te impide ser independiente
Puede parecer una obviedad, pero no lo es tanto. Para que una relación sea saludable y se pueda mantener en el tiempo, tanto tú como tu pareja debéis mantener un espacio para vuestra individualidad. Es como si existiera un espacio vuestro, otro tuyo y otro suyo. El psicólogo Dr. Jorge Barraca, experto en terapia integral de pareja, aseguraba en su libro ‘Terapia integral de pareja. Una intervención para superar las diferencias irreconciliables’ que “por muchas cosas que se tengan en común, cada miembro de la pareja es una persona diferente y posee su propia historia, su propio carácter, sus matices respecto a intereses, valores, aspiraciones y, lógicamente, una familia de origen con su particular funcionamiento y realidad. En suma: dada la variedad entre las personas es imposible encontrar coincidencia en todo, y probablemente tampoco sería lo deseable”. Una buena pareja entiende que existe un espacio individual y lo respeta, animándote a explorarlo de forma independiente.
Tiene responsabilidad afectiva
La psicóloga Marta Martínez Novoa define en su libro ‘Que sea amor del bueno: Por qué la responsabilidad afectiva es clave en tus relaciones’ la responsabilidad afectiva como “tener conciencia de que las relaciones y, en especial, los vínculos que se crean en ellas están formadas por varias personas, no solo por nosotros mismos y que todas las personas implicadas tienen sentimientos y necesidades.” Una buena persona siempre tiene responsabilidad afectiva no solo contigo, también con sus amigos, con sus compañeros de trabajo, con su familia… Observar cómo se comporta con el resto de personas que le rodean, es una muy buena forma de ver quién es en realidad.
Apoya tu desarrollo personal
Creo que la frase “estoy orgulloso de lo que has logrado” es una de las más bonitas que me ha regalado mi pareja en el tiempo que llevamos juntos. Con ella me demuestra no solo que me valora, también que ve quién soy, que conoce mis metas y que me apoya. Mi pareja es una de las personas que más me alienta a ser la mejor versión de mí misma. Aplaude mis éxitos y me apoya en las dificultades sin sentirse amenazado por mi camino, sino feliz por compartirlo conmigo. Este tipo de apoyo demuestra que está interesado en mi felicidad y crecimiento y no sólo en el suyo. Y es una demostración más de que estoy en una relación con un ser humano extraordinario.
Se comunica de forma eficaz
Si alguien expresa sus necesidades, deseos y preocupaciones con respecto y se asegura de escuchar activamente los tuyos, es que sabe que la comunicación es vital en una relación. Para hacerlo de forma eficaz se deben usar palabras claras, respetuosas y honestas sin recurrir a la hostilidad hasta en una conversación complicada. Las buenas personas hablan desde la calma aunque estén dolidos porque saben que no se trata de ganar una discusión, sino de fortalecer la relación como bien afirma la psicóloga Mamen Jiménez.
No tiene miedo a mostrarse vulnerable
La investigadora Brené Brown dice que “La vulnerabilidad es la cuna del amor, la pertenencia, la alegría, el coraje, la empatía y la creatividad. Es la fuente de la esperanza, la empatía, la responsabilidad y la autenticidad”. Si tu pareja se permite ser vulnerable contigo es porque confía en ti, y valora vuestra intimidad emocional. Y eso hace que aumente vuestra conexión.
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