Aunque te digan que "fluir" es lo mejor, esta palabra esconde poca inteligencia emocional y responsabilidad afectiva
No sé la de veces que he escuchado en mi vida eso de “estamos fluyendo”. Y siempre me ha parecido una excusa para el compromiso. Pues bien, en el mundo de Tinder, Bumble y las mil y una aplicaciones de citas que existen se ha acuñado un nuevo término que parece encajar a la perfección con ese concepto de fluir.
Hablamos de las llamadas situationships, que a pesar de haberle puesto un nombre cool y moderno, lo que en realidad significa es “no poner etiquetas”, que en muchos casos se traduce a algo mucho más sencillo: miedo al compromiso.
Qué significa estar en una situationship
El término situationship fusiona las palabras relación y situación y podría traducirse como “en una situación”. Hace referencia a un estilo de relación en la que ambos sabéis que tenéis algo pero no queréis poner etiquetas. Os acostáis, pero no estáis saliendo. O sí, quién sabe. Es complicado. Hacéis planes, pero no son una cita. No os dais la mano.
Es la relación de Barney y Robin cuando comenzaron en 'Cómo conocí a vuestra madre' y no quería admitir que eran novios. Offtopic: tienes la serie en Disney+ y siempre es un buen momento para verla.
Es la negativa a querer comprometerse y tener la temida conversación por algunas personas de “qué somos”. Algunos lo llaman el “casi algo”, porque es común que se use este término al comenzar una relación. ¿Recuerdas cuando empezabas una relación pero las cosas no estaban claras porque tú estabas muy in y la otra persona no tanto? Contestabas “es complicado” y ahora los zetas usan el concepto situationship.
Según Tinder, en 2022 los jóvenes solteros se apropian del situationship como un estado de relación válida. De hecho es una “intención de relación” que más del 49% de los miembros añadieron a sus perfiles según datos de la aplicación de citas.
No es la única aplicación de citas que ha visto cómo esta nueva tendencia crecía en adeptos. Adopte hizo una encuesta ya en 2019 en la que el 33,91% de los usuarios buscaba relaciones temporales, entre ellas un 15% las llamadas situationships.
Cómo es una situationship
Si analizamos el concepto vemos que quien está en una situationship está junta, pero no quiere decir que lo está. Huyen de las etiquetas. Están cerca, pero poco, no vaya a ser que la relación se ponga seria y conlleve unas responsabilidades con las que no me siento del todo cómoda.
En una situationship no se conoce a los amigos y ambos están de acuerdo en ello, es imprescindible (si no habéis hablado de esto con anterioridad y no te presenta a sus amigos y familia a pesar de que lleváis tiempo juntos lo que está pasando nos es que estéis en una situationship, sino que está haciéndote pocketing).
Además los planes son casuales, de última hora y sin ninguna planificación. Y mira que he dicho planes y no citas, porque en una situationship no hay citas, que eso es de parejas. No hay que confundirlo con amigos con derechos, en los que solo hay sexo sin compromiso. Aquí hay una relación, solo que a quien lo practica le da un poco de miedete eso de llamarlo “pareja” porque es demasiado serio.
Los riesgos de las situationships
Lo cierto es que las situationships como una forma de tener una relación con menos presión es en realidad una excusa de la generación Z para no comprometerse. Alejándonos de las etiquetas y practicando eso que tantos llaman “fluir”, lo que hacemos es no comprometernos y corremos el riesgo de no mostrar esa responsabilidad afectiva que cualquier persona con la que compartamos la vida (sea pareja, amiga o situationship) merece.
La psicóloga Cristina Callao nos contaba en Instagram (@co_razones) qué es eso de fluir cuando hablamos de relaciones. Ella afirma que “el “vamos a fluir” NO debe servir como pretexto para seguir teniendo ahí a esa persona que estás conociendo mientras decides qué hacer. El “fluir” se ha llevado al extremo cobarde, al no responsabilizarse”.
De hecho en uno de sus últimos post de Instagram explicaba que eso de fluir es la excusa que mucha gente está usando para “justificar su desentendimiento en las relaciones afectivas”. Es decir, utilizo el término fluir para practicar eso de “hacer lo que me apetece” sin pensar en la otra persona.
Pues bien, la premisa para una relación de situationship es fluir. Evidentemente si hablamos ambos miembros de la pareja de que estamos en esa situación y a los dos nos compensa y nos gusta, sí estamos atendiendo a esa responsabilidad afectiva, pero al tratarse de un tipo de relación casi ubicada en una zona de grises, sin límites, sin hablar de sentimientos ni emociones, se corre el riesgo de que se genere ansiedad en alguno de los miembros de la pareja.
No hay compromiso, pero sí estáis juntos y esa incongruencia puede generar confusión y que terminéis más en una relación boomerang que en una situationship. Si vas a abrazar este nuevo tipo de relación y hay respeto y comunicación entre ambos, hazlo, pero siempre siendo consciente de los riesgos.
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Fotos | Camila Blando en Unsplash, Shingi Rice, Adam Winger y Leonardo Sanches en Unsplash
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