Así es como puedes convertir tu nevera en inteligente sin gastarte un dineral

La gran utilidad que tienen las neveras inteligentes es que, además enfriar los alimentos como una nevera normal y corriente, son capaces de detectar cuando algo se acaba y pedirlo por ti. O indicarte cuando un alimento va a caducarse pronto, por ejemplo. 

El gran inconveniente es sin duda el precio. Que la nevera se convierta en un aparato más, conectado en un hogar inteligente puede elevar su precio a más de 2500 euros, lo que no es para nada accesible.

Pero ahora puedes transformar en inteligente una nevera normal y corriente sin necesidad de gastarte un dineral, solo instalando una pequeña cámara en su interior.

La cámara que transforma las neveras en inteligentes

Smarter FridgeCam es una cámara que se diseñó con el propósito de ayudar a disminuir el desperdicio alimentario en los hogares de una forma sencilla: te avisa cuando los alimentos están próximos a caducar y te sugiere recetas para aprovecharlos y convertir tu cocina en zero waste. 

Además, te alerta cuando la temperatura de la nevera no es la adecuada, cuando un producto habitual está próximo a terminarse y hasta pide los alimentos por ti. Lo hace con una cámara conectada que enfoca al interior de la nevera y que se combina con una app (disponible para iOS y Android) instalada en tu teléfono móvil.

Cada vez que abres la nevera, la cámara hace una foto y la manda a tu teléfono. Así siempre puedes saber qué hay en la nevera sin necesidad de abrirla, y puedes ser más consciente cuando vas a la compra, por ejemplo, de lo que tienes y no en tu frigorífico.

Su precio es de 149 libras, y aunque solo está disponible en UK a través de la página web del fabricante, parece el método ideal para transformar una nevera común y corriente en una opción inteligente y conectada. Piénsalo, puede ser la excusa ideal para conseguir tener la nevera tan ordenada como esas que ves en Instagram.

La aplicación llega incluso a avisarte de que un producto va a terminarse si detecta que estás cerca de una tienda en la que podrías comprarlo. Quizá es algo siniestro saber que tu nevera sabe dónde estás en cada momento, pero las nuevas tecnologías y el big data cada día nos acostumbran más a este tipo de cosas. 

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