Relleno en los labios, implantes en los pómulos, una nariz más fina... Todo sin necesidad de cirugía ni contouring y en cuestión de segundos. Desde que el pasado verano Spark AR, la plataforma desde la que se generan y aprueban los filtros de realidad aumentada de Instagram, se abriera a todos los usuarios que quisieran crear el suyo propio, vienen triunfando especialmente aquellos que te dejan la cara como a una Bratz.
Un filtro muy popular, en concreto, ha sido objeto de críticas por parte de los usuarios y los medios por promover una imagen corporal negativa entre la gente joven. Aunque ya ha sido borrado, Fix Me marcaba la cara con un rotulador como lo haría un cirujano plástico.
A pesar de la popularidad de filtros como el mencionado o como Plastica, Princess Carolyn o Bad Botox, parece que, a partir de ahora, este tipo de máscaras no tendrán cabida en la red social.
Algunos medios internacionales adelantaban la noticia de que Instagram iba a prohibir los filtros de realidad aumentada asociados con la cirugía plástica y Facebook, su empresa matriz, nos lo ha confirmado hoy mismo con un comunicado:
"Estamos reevaluando nuestras políticas porque queremos que los filtros sean una experiencia positiva para la gente".
Aunque, mientras esas nuevas políticas llegan, la empresa no quiere quedarse de brazos cruzados y nos comunican que pasarán eliminar todos los efectos de su galería que estén relacionados con la cirugía estética, dejarán de aprobar nuevos efectos de este tipo y procederán a eliminar aquellos que sean reportados por los usuarios.
No obstante, no especifican qué requisitos ha de tener un filtro que modifique la cara de los usuarios para poder ser aprobado o qué se considera "relacionado con la cirugía estética". ¿Quedará fuera cualquiera que modifique nuestros rasgos faciales? ¿Qué criterio seguirán para determinar si un filtro promueve la cirugía plástica o no?
Instagram ha centrado este año sus esfuerzos en minimizar el daño psicológico que pueda causar entre sus usuarios y trabaja en hacer de la aplicación un lugar más amable para la comunidad.
Otras medidas que han tomado recientemente para rebajar dismofia y la presión que las redes sociales ejercen sobre la imagen corporal fue censurar todas las fotos que incitaran a la anorexia y la bulimia, así como ocultar a los menores de 18 años aquellos posts que promocionen productos para perder peso o promociones de retoques estéticos. Del mismo modo, también elimina los posts promocionales de productos "milagro" con links a ofertas comerciales y códigos de descuento.
Fotos | Instagram Aretha Galleta y Teresa Fogolari.