Metaverso para dummies: qué es y cómo afecta a la moda que tengamos una vida virtual

En 1992 la novela de ciencia ficción Snow Crash de Neal Stephenson presentaba el Metaverso en el que se convirtió en el gran bestseller ciberpunk de los noventa. Una novela futurista que como ocurre con toda la ciencia ficción, termina teniendo muchas pinceladas de realidad.

A día de hoy el Metaverso se usa, según nuestros expertos en tecnología de Xataka, para describir visiones de espacios de trabajo tridimensionales o virtuales. Un mundo virtual en el que interactuar y que se crea para parecerse a la realidad, al estilo de la película de Spielberg, Ready Player One.

Qué es el Metaverso

Cuando hablamos de Metaverso lo hacemos de un término general que se aplica a cualquier mundo virtual al que nos conectaremos y que nos hará pensar que estamos dentro de él. Simplificándolo mucho, sería algo así como una realidad alternativa para hacer lo mismo que podemos hacer en la vida real, como hablar con otras personas, comprar o jugar, pero sin salir de casa.

En esa realidad alternativa somos un avatar como en la película de James Cameron. Un cuerpo, en el caso del Metaverso, digital, que nos sirve para interactuar en ese otro mundo, justo como en la película. No hay un único mundo virtual, Facebook quiere tener el suyo pero ya hay lugares como Decentraland (una plataforma de realidad virtual descentralizada) que están en marcha y funcionando.

Usando dispositivos de realidad virtual y realidad aumentada, como las gafas de VR de Oculus Quest 2, la experiencia será más inmersiva y podremos disfrutar de un concierto, un desfile de moda o un paseo por un museo sin movernos de casa.

Este proyecto en el que empresas como Facebook está invirtiendo puede parecer una locura (o una pérdida de tiempo porque para qué hacer en otra realidad lo que puedo hacer en esta), pero llevamos mucho más tiempo del que parece con avatares en juegos como el Animal Crossing, donde lo que hacemos es “vivir” pero en un lugar en el que físicamente no estamos allí, algo que te recuerdo que ya hacíamos en los dos mil con Los Sims.

Si con esta explicación aún tienes dudas, Fabio Rodríguez nos explica desde Xataka en este vídeo los entresijos del mundo virtual que Zuckerberg se ha propuesto crear y que tanto lleva sonando todos estos meses. Una propuesta que en 2025 nos permitirá, según los expertos, hacer hasta el 50% de lo que hacemos ahora mismo en la vida real, pero en el Metaverso.

Qué papel juega la moda en el Metaverso

Desde hace años las firmas de moda se han planteado un proceso de digitalización que la pandemia ha acelerado de una forma notable. La imposibilidad de salir de nuestras casas obligó a muchas firmas a sustituir los tradicionales desfiles por apuestas digitales y en varios casos, por apuestas virtuales como los desfiles dentro de Animal Crossing.

Firmas como Louis Vuitton llevan años vinculadas al mundo gamer con juegos como el League of Legends, y ambos mundos, el de los videojuegos y el de la moda, son algunos de los sectores que más apuestan por el Metaverso, así como el del arte con los famosos NFTs.

Y es que si lo piensas, los avatares que nos representarán en ese mundo virtual son representaciones que también tienen que vestirse, y ahí es donde entran las firmas de moda. Tal es el auge de la moda en un ambiente virtual que en Reino Unido ya se puede estudiar diseño de moda digital.

Los diseñadores de moda tienen así un papel protagonista en este Metaverso y ya hay empresas que se dedican solo a la moda digital como la plataforma This Outfit Does Not Exist. Y es que hay moda que puede ocupar el espacio virtual, el físico o ambos, algo que se incorpora al llamado “phygital retail''. Por ejemplo Moschino ha vestido a Los Sims en una colección que podemos comprar física o virtualmente y Zara hizo recientemente una colaboración con Ader Error en el Metaverso.

El futuro de la moda en el Metaverso

dRESS X Auroboros, por ejemplo, se convirtió en la primera marca digital en desfilar en la London Fashion Week, diseñando ropa para usar con realidad aumentada que se ciñe completamente a tu cuerpo, y Ralph Lauren inauguró en diciembre una tienda en Roblox, un juego multijugador gratuito social y online con 50 millones de usuarios activos al día que ya ha colaborado con firmas como Vans, por ejemplo, o que tiene hasta sus propios Fashion Awards.

Decentraland anunció que celebraría en marzo de 2022 la primera Metaverse Fashion Week de la historia. Este proyecto se hará en colaboración con el mercado de lujo de Polygon y UNXD, y los asistentes a esta semana de la moda podrán ver los desfiles, hablar con otros asistentes y hasta comprar, aunque todo online y dentro del Metaverso.

¿Es realmente rentable? Pues vamos con un ejemplo tangible, el de la Collezione Genesi, una colección exclusiva de nueve piezas diseñadas por Domenico Dolce y Stefano Gabbana para UNXD, compuesta por NFT y prendas físicas. Solo nueve. Se subastaron en septiembre recaudando 1.878,71 de Etherum, que al cambio serían unos 6,17 millones de euros. Repito: solo nueve piezas.

Otro ejemplo es el de los NFTs del artista Mason Rothschild y sus metabirkins que tienen muchas similitudes con el clásico Birkin de Hermès y que comenzaron costando 450 dólares y ya suman más de 800.000 dólares. Este caso ha estado rodeado de polémica cuando la firma Hermès ha tratado de denunciar el diseño porque afirman que “infringe la propiedad intelectual y los derechos de marca comercial”, pero este “nuevo mundo” aún hay dudas sobre cómo se aplican las leyes del mundo real sobre el virtual.

En la misma situación se encuentra Nike que en diciembre se hizo con RTFKT, un estudio de diseño de NFTs para introducirse en el mercado. Solo que antes de que eso pase ya existen NFTs de Nike. ¿Son falsificaciones? En realidad es algo aún por dictaminar. Nike ha demandado al marketplace StockX por la venta de NFTs de zapatillas con su logo. En la demanda se reclama una compensación por daños y perjuicios y un dictamen judicial que obligue a paralizar la comercialización de estos NFTs que algunos han alcanzado ya un valor de 12.000 euros.

Gucci por ejemplo ha vendido la versión digital de uno de sus bolsos por el doble de lo que cuesta la real. Con esta pequeña pincelada nos queda claro que los NFTs, el Metaverso y la moda digital es algo de lo que hablaremos (y mucho) en un futuro que ya es presente.

Nota: algunos de los enlaces aquí publicados son de afiliados. A pesar de ello, ninguno de los artículos mencionados han sido propuestos ni por las marcas ni por las tiendas, siendo su introducción una decisión única del equipo de editores.

Fotos | Decentraland, Dolce & Gabbana, Animal Crossing, Zara, StockX