Cáncer de mama: de la detección a la recuperación con un impacto emocional del que nunca se ha hablado

No hay palabra más dura en nuestro diccionario que ese temido cáncer y es que aunque nadie deseamos padecerlo, es una enfermedad cada vez más común. Según la Organización Mundial de la Salud, 1 de cada 8 mujeres desarrollará cáncer de mama en algún momento de su vida y aunque son cifras alarmantes, los avances en el tratamiento ha hecho que la tasa de supervivencia alcance el 85%.

Esta semana, Upeka by Aegon estrena nuevo episodio de forma totalmente nueva y es que la ocasión lo merece ya que para hablar de este tema tan serio necesitamos testimonios reales y junto a Anne Igartiburu están Julia Valera, Cristina Medina y la Dra. Alexandra Henriquez. Siempre los médicos evitan transmitir este diagnóstico evitando la palabra cáncer y no es por ocultar información, sino porque la mayoría de las personas lo asocian con la muerte y puede provocar una reacción demasiado negativa. Cada mujer gestiona su proceso de una manera diferente y todas son válidas, por eso no debemos juzgar si alguien  habla de ello sin tapujos o si se le está complicando prefiriendo llevarlo en privado.

Esta parte del cuerpo es uno de los símbolos más femeninos que hay y tras la cirugía, es muy duro verse sin esos rasgos tan característicos llegando a sentir tristeza y rechazo de tu propia persona. Además, muchas son las pacientes que desarrollan depresión por eso y también por ese bajón tras finalizar el tratamiento que sienten que ya no pueden hacer más por mantenerse bien y luchar contra la enfermedad. Se hablan de 5 fases dentro del cáncer de mama: negación, ira, negociación, depresión y aceptación. 

Nunca se habla del sentimiento de culpabilidad y es que en muchas ocasiones se vive al volver a tu rutina diaria notando ese miedo por volver a recaer o incluso para esas madres de familia que se sienten mal por tener que dejar su rol a un lado para recuperarse. El sentir que no estamos solas y que contamos con nuestros seres queridos es crucial ya que anima en el proceso y siempre se necesitan algunos mimos en los momentos más difíciles. 

La detección primera es crucial para un mejor diagnostico y hay que primar aspectos como la alimentación donde hay que excluir el alcohol y los procesados, hacer ejercicio para mantenernos saludables y un buen descanso. El estrés es uno de los peores factores dentro del cáncer ya que nos daña el sistema inmune y que debemos intentar reducir. 

Sin duda esta enfermedad se lleva mejor de la mano y con toda la fuerza de los que nos aman. Y tú, ¿Estás concienciada con ella? 

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