Antes de que existiera 'Operación Triunfo', David Bisbal cantaba en una orquesta, y si hubiera visitado un pueblo random ni nos habríamos enterado. Pero llegó el programa y todo lo que tocaba Bisbal se convertía en oro. Hace ya unos años nos descubrió este pequeño pueblo leonés escondido cuando el cantante lo visitó y colgó una foto en su cuenta de Instagram.
Se llama Castrillo de los Polvazares, se encuentra a apenas 8 minutos de Astorga, y a menos de una hora de León. Y a nosotras ya nos ha enamorado.
Castrillo de los Polvazares, un pueblo medieval detenido en el tiempo
No puedo empezar a hablarte de Castrillo de los Polvazares, uno de los más bonitos de la provincia y parte de la comarca de la Maragatería, sin decirte que si vas debería estar penado por la ley que no pruebes su cocido maragato. De hecho, se dice que la receta se inventó justo en este pequeño pueblo.
Como el cocido madrileño, se sirve en tres vuelcos, pero esta vez se comen al revés: primero las carnes y el relleno, luego los garbanzos y las berzas y, por último, la sopa de fideos. Los expertos de 'Directo al Paladar' nos recomiendan el que preparan en Casa Juan Andrés, en la calle Juan José Cano 16 de este pequeño pueblo.
Si te quedan fuerzas después de comer su espectacular cocido maragato, piérdete entre sus calles, porque son espectaculares. Cruzar el Puente Viejo sobre el río Jerga debería ser un imprescindible de esta escapada, así como pararte en la Iglesia de Santa María Magdalena o disfrutar de sus casonas, la de Salvadores, que tienen un encanto único.
Castrillo de los Polvazares apenas tiene 100 habitantes y está considerado como el ejemplo más bello de la arquitectura popular de toda la comarca de Maragatería. Una comarca muy relacionada con el gremio de los arrieros que vivieron en toda esta zona y que parece que se ha detenido en el tiempo.
Este pueblo de calles empedradas y casas blasonadas fue declarado conjunto histórico artístico y conserva íntegra su arquitectura popular. Su entorno es tan idílico que se convierte en una escapada romántica para hacer en pareja perfecta.
La piedra y arcilla roja de sus fachadas contrasta con los colores de los portones y ventanas en tonos azules, verdes y blancos. El pasado arriero se vive especialmente en la calle Real, la más importante de la villa.
Fotos | iStock (Alberto Carrera, David Sanchez, Estanis Banuelos, jon chica parada, Manel Vinuesa y cipango27), @davidbisbal.
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