Sí, Teruel no es que exista, es que es una ciudad (y una provincia con pueblos como Albarracín) que merece mucho la pena conocer. Por ello, hoy hemos querido hacer un repaso a esta capital de provincia, a algunos de sus rincones más emblemáticos, aquellos con los que enamorarse de un enclave como este.
La Catedral
Comenzamos con un clásico de las grandes ciudades que no puede faltar en cualquier ciudad que se precie. En el caso de Teruel se trata de la Catedral de Santa María de Mediavilla de planta cuadrada, una torre de tres cuerpos y un remate octogonal. Lo más bello de esta construcción es, sin duda, la techumbre mudéjar de madera pintada que está considerada la ‘capilla sixtina del mudéjar’.
El acueducto de los Arcos
Se trata sistema de traída de aguas de Pierres Vedel a mediados del siglo XVI y una de las obras de ingeniería más relevantes del Renacimiento español que, además sirve de paso peatonal para facilitar el tránsito el gran barranco que separa a la ciudad del arrabal. Una joya donde sacar unas fotos espectaculares.
La plaza del Torico
Sí, si tenemos que parar a hacer un descanso nos pasamos por la Plaza del Torico donde podremos disfrutar de sus edificios modernistas, sus bares y restaurantes y, durante las fiestas, veremos cómo colocan el pañuelo “al torico”.
La Torre de El Salvador
Otro símbolo de la ciudad y del arte mudéjar es esta Torre de El Salvador que tiene el título de Patrimonio de la Humanidad desde 1986. Sin duda, un lugar en el que dejarnos embriagar por su belleza.
La Escalinata
No, no iba a faltar en la selección la Escalinata del Óvalo que fue inaugurada el 5 de junio de 1921 es obra de José Torán con el fin de comunicar el centro de la ciudad con la Estación de Ferrocarril.
Se trata de una construcción declarada Bien de Interés Nacional de estilo neo-mudéjar que une la arquitectura mudéjar y el estilo modernista y que es una preciosidad.
La Torre de San Martín
Aunque es muy similar a la de El Salvador (incluso a la Catedral) es otro de los máximos exponentes del mudéjar turolense. Se ubica en la plaza de Pérez Prado, frente a la calle de los Amantes y es un lugar muy mítico para visitar.
Los Amantes de Teruel
Por supuesto, no podía faltar. La leyenda de los Amantes de Teruel es de las más famosas que existen y su mausoleo, donde descansan enamorados, Isabel de Segura y Juan Martínez de Marcilla, se encuentra en la ciudad, en la Iglesia de San Pedro concretamente.
Y ya que estamos por la provincia de Teruel, os queremos recomendar dos lugares impresionantes donde alojaros: el Palacio Matutano Daudén y Torre del Marqués, dos hoteles con personalidad propia ubicados en dos comarcas turolenses unidas cada invierno por la temporada de la trufa: el Maestrazgo y el Matarraña, respectivamente.
Hotel Restaurante Palacio Matutano-Daudén
Hotel Torre del Marqués
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Fotos | Wikipedia y Unsplash
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