El verano está llegando a su fin, pero aún le quedan unos pocos findes para exprimir al máximo y este es el lugar perfecto para una escapada antes de que el buen tiempo se despida. Este espectacular pueblo, situado a menos de 40 minutos en coche desde Girona, tiene un encanto medieval que te hará sentir como si hubieras viajado en el tiempo.
Besalú parece salido directamente de un cuento, con sus calles empedradas y sus monumentos históricos. Solo tiene 2.500 habitantes, pero es famoso a nivel internacional por ser una de las villas medievales mejor conservadas de Cataluña. De hecho, mantiene tan bien su herencia histórica que incluso ha sido el escenario de grandes producciones cinematográficas, como 'Juego de Tronos'.
Su centro histórico es el siglo XII hecho realidad en pleno siglo XXI, con construcciones intactas en el tiempo de la talla de su puente románico, que te recibe a la entrada para llevarte directamente sobre el río Fluvià hasta las puertas de la ciudadela. El pueblo también conserva sus murallas, que delimitan un laberinto de callejones e iglesias, como las de Sant Vicenç y Sant Julià, ambas con más de 900 años de historia.
Además de estos dos templos góticos con casi 1000 años de historia, en Besalú también está el Monasterio benedictino de Sant Pere construido en el siglo X y la Casa Llaudes o Casa Cornellà, de arquitectura civil románica del siglo XII y con un patio central precioso.
Otro rincón imperdible y famosísimo de Besalú es su antigua judería, que se encuentra en pleno casco antiguo. Esconde uno de los dos únicos Miqvé descubiertos en la Península Ibérica, un baño ritual judío de 1264 con valor arqueológico incalculable que podemos visitar yendo a la Oficina de Turismo de Besalú. Está perfectamente conservado y es uno de los mayores reclamos turísticos de toda la región.
Fotos | Turisme Garrotxa, Patrimonio Garrotxa.
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