¡Y tan alta! Concretamente, más de 20 metros. Ésa es la medida de la enorme chaqueta Chanel que decoraba el centro de la pasarela en el Grand Palais de Paris. Una escenografía verdaderamente impactante y cuidada: las modelos salían a desfilar por la juntura de la chaqueta y volvían a desaparecer luego en ella. ¿Verdad que se ven pequeñísimas en comparación con esa construcción? ¡Y eso que las modelos suelen ser muy altas!
Y es que en los desfiles hace tiempo que ya no se cuida solamente la ropa, los complementos y los accesorios. El maquillaje y la peluquería juegan un papel importantísimo para dotar a las modelos del aire deseado y la escenografía todavía más. Todo se vigila: la música, la iluminación, el decorado… Todo está estudiado para ambientar de forma impecable las creaciones de los diseñadores.
Vía | Fashionologie
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