Marea de celebrities en Milán. La ciudad italiana más gris y deprimente de la península itálica se llena estos días de famosas que viene de todos los puntos del planeta, aunque gana por goleada Estados Unidos, para se testigos presenciales del espectáculo más grande del mundo. Por ejemplo, el desfile de Prada, entre otros. Eso sí, no todo es placer y amor incondicional por la moda: todas tienes un motivo para cruzar el charco.
El de Mary-Kate Olsen, es la promoción de su línea de ropa Elizabeth and James, que en breve tiene pensado colaborar con la firma Steve Madden para lanzar una colección de zapatos que puede ser de lo más interesante y a precios no demasiado elevados.
Así de abrigada veíamos a la gemela rebelde en el aeropuerto de Milán, empujando ella misma su propio cargamento de maletas, con un abrigo marrón de hombreras armadas y unos terribles leggins de latex.
Del otro lado del buen gusto se situa Gwyneth Paltrow, a la que se pudo ver acudiendo como invitada de lujo a la presentación de la nueva colección de complementos de Tod's, firma de la que recordemos, es imagen. Y lo hacía maravillosamente enfundada en un vaporoso y tableado vestido color naranja de corte exquisito. Y unos zapatos-botín acharolados algo bastos, de esos que le gustan tanto a ella, que deslucían un poco el estilismo (aunque le ponían el punto desenfadado).
La cantante Rihanna sería el término medio y se situaría entre Mary-Kate y Gwyneth: ni tanto, ni tan calvo. Si en el desfile de Gucci enseñaba más de la cuenta con un mini vestido negro, por las calles de Milán se mostraba algo más discreta y paseaba relajada con una maxi camisa masculina en blanco impoluto, sus inseparables jeans pitillo y unas sandalias de tacón altísimo. En su línea.
En trendencias | Rachel Zoe en la Semana de la Moda de Milán
Ver 2 comentarios