Muchas veces se asocia la dieta sana con sacrificio o aburrimiento, pero hay muchos alimentos saludables que además de contribuir a mantener la línea son de lo más apetecibles y pueden servirnos como una buena alternativa para aperitivos y picoteos varios.
Los encurtidos son un buen ejemplo, sabrosos y ligeros, en general aportan muy pocas calorías y tienen un alto contenido en fibra, vitaminas y minerales.
Para su conservación se utiliza siempre vinagre y sal, a los que a veces también se les añade agua, especias y otros condimentos. Hay una preparación que no puede ser más sencilla y yo aprovecho siempre que me sobra coliflor (así de paso me ahorro el olor al cocinarla) que consiste en trocearla, limpiarla bien y salarla para después dejarla reposar unos días en un tarro de cristal cubierta de vinagre de vino blanco, con unas hojitas de laurel.
En casa o en la tienda existen un montón de opciones: pepinillos, puerros, zanahorias, berenjenas, cebolletas, guindillas... mi favorita son los alcaparrones, como aperitivo están deliciosos ¡Y sólo aportan 14,8 calorías cada 100 gramos! El resto suelen tener valores similares excepto las aceitunas que contienen entre 150 y 300 calorías cada 100 gr.
Además si estamos en un bar con los amigos tomando el típico vermú de verano ¿Qué mejor que compartir unas banderillas o un variado? Con estas temperaturas sientan mucho mejor que otros picoteos, son digestivos y también contribuyen a mejorar nuestra piel, ya que al fin y al cabo no dejan de ser hortalizas y verduras.
Ahora que la época de la operación bikini ya va quedando atrás es un buen momento para pensar en adquirir unos buenos hábitos alimenticios, que nos acompañen siempre. Los encurtidos nos ayudan a no pasar hambre entre horas, aunque si se tiene algún problema con el consumo de sal (tensión alta etc.) es recomendable tomarlos con moderación.
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