Esta mañana me ha pasado una cosa muy curiosa. Acudía a una presentación, a la que me habían mandado, y que se celebraba en el nuevo restaurante M29 del hotel Miguel Ángel de Madrid cuando, nada más llegar, me vino a dar la bienvenida Carlos Rodríguez de Piazza Comunicación. Carlos en seguida me presentó a una señora guapísima - cuya cara me sonaba un montón - pero que, con lo despistada que soy, en ese momento no supe ubicar.
El caso es que me puse a hablar con Ana Rodríguez Mosquera, pues así se llamaba mi interlocutora y alma de la marca Oceanyx, quien me fue explicando que, en su búsqueda incansable por encontrar una respuesta eficaz a los problemas de su piel atópica, había dado con unos laboratorios en Madrid que habían creado para ella, siguiendo sus indicaciones, unos sérums formulados con algas marinas, vitaminas, péptidos y otros principios activos que le habían salvado la piel. Y como el resultado fue tan bueno, y ella siempre había sido una mujer muy emprendedora, decidió compartir con otras personas que sufriesen sus mismos problemas de piel atópica y sensible estos productos.
De todos es sabido que las algas marinas recogen todo el poder del océano en su interior. Por este motivo, Oceanyx ha recurrido al océano como fuente inagotable de vida, energía y belleza, para crear seis sérums únicos, capaces de ofrecer a la piel un verdadero aporte de juventud y salud.
Entrevista a Ana Rodríguez Mosquera
Ana, me gustaría que te presentaras.
¡Buenos días! Soy Ana María Rodríguez Mosquera. Mi formación, en principio, no tiene nada que ver con el mundo de la estética. Soy licenciada y doctora en sociología y ciencias políticas, y soy empresaria - porque tengo franquicias de Tous. No puedo decir que me dedique a la cosmética, aunque... ¡ahora sí!
He llegado hasta aquí por un problema, grave, de piel atópica, y en mis indagaciones en pos de soluciones para mis problemas de piel, busqué un laboratorio en Madrid, para ver si me hacían un sérum que me fuese bien, y no me provocase alergias ni irritaciones. Y, a partir de ahí, un día pensé: ¡bueno, y por qué no comparto todo este con los demás? Y, ¡aquí estoy! Risas.
¿Por qué Oceanyx?
Porque los sérums de Oceanyx están elaborados con productos que vienen del mar. Los importamos directamente de Estados Unidos, las vitaminas también vienen del mar. Todos estos productos, y los que vamos a seguir desarrollando tienen y tendrán vinculación con el mar. Y tenemos responsabilidad social.
¿Que se traduce en...?
Oceanyx destina parte de sus recursos a fundaciones dedicadas a la protección del fondo marino, y colabora con la Asociación Síndrome de Down de Toledo, poniendo su proceso de producción (serigrafías del packaging) al servicio de este programa de inserción social.
Además, hemos empezado a colaborar con Océana - la mayor organización internacional centrada exclusivamente en la conservación de los océanos, la protección de los ecosistemas marinos y las especies marinas amenazadas -, a cuya embajadora Amber Valetta tuve el placer de conocer personalmente durante la fiesta Eco Blue que patrocinó Tous en Barcelona. En breve vamos a firmar con ellos un convenio, porque yo creo que, hoy en día, la responsabilidad social en cualquier empresa es muy importante.
Me gustan las líneas sobrias, gráficas y depuradas del frasco...
Estos sérums son productos con una alta concentración de principios activos, y un fuerte grado de penetración; por lo cual son aptos tanto para hombres como para mujeres. Si te fijas en el logo, verás que hemos escrito Oceanyx con la y griega y con la x haciendo un guiño a los cromosomas. Llevo dos años trabajando en este proyecto y todo ha sido muy cuidado, muy pensado. Me he sabido rodear de muy buenos asesores.
Me ha parecido curioso eso que has comentado de que te pusiste a buscar un laboratorio para que te hiciese un serúm a la medida...
¡Quien busca, encuentra! Sin embargo, esto es algo que no todo el mundo se plantea. Te confieso que también conté con la inestimable ayuda de una amiga médica que, no sólo me asesoró, sino que también me fue marcando el camino. Por lo cual, le estoy muy agradecida.
Háblame más de estos sérums.
Son sérums formulados con principios activos puros, sin estabilizadores ni parabenos y, por supuesto, ¡sin alcohol! Se apoyan totalmente en ingredientes naturales y, más concretamente, en principios activos extraídos de las algas marinas, que nutren, reparan, fortalecen y renuevan la piel de forma visible y a corto plazo.
Los hemos dividido por edades, ya que Oceanyx reconoce las distintas necesidades de la piel en sus distintas etapas naturales: entre 25 y 35 años ; entre 35 y 45 años; y de 45 años en adelante, porque las necesidades de hidratación, regeneración o reparación varían lógicamente.
El sérum hidratante al aportar ácido hialurónico al sesenta por ciento, proporciona una hidratación superior manteniendo la humedad de la piel sin aportar grasa. En el vitamínico, la combinación de vitaminas A, B y C proporciona flexibilidad y regeneración desde las capas más profundas de la piel. La vitamina B aumenta la síntesis de colágeno y rompe la melanina, corrigiendo la pigmentación irregular. Al llevar vitamina C no podemos luego exponernos al sol sin un protector.
El sérum rejuvenecedor, al estar formulado con argireline, estimula la tensión facial. Este péptido está formado por aminoácidos que actúan sobre los músculos tensores faciales. El sérum reparador ayuda a frenar el proceso de envejecimiento de los tejidos. Las algas y el colágeno marino del reafirmante, gracias a su alta capacidad de penetración en la piel, forman una especie de película que retiene el agua de la dermis, actuando con un efecto esponja. Como, además, aporta sales minerales, éstas ayudan a disminuir los signos de fatiga.
Finalmente, la joya de la corona, el sérum regenerador - creado a partir de células madre del cardo marino -, estimula la actividad de las células para una mayor auto reparación desde su interior. La textura de estos sérums es muy agradable. Como yo tengo la piel atópica, y todo me da alergia, he preferido dotarlos sólo con un suave toque a mandarina. Son productos naturales, absolutamente recomendables para pieles con problemas. ¡Y quienes no los tengan, también los pueden usar, claro!
¿Cuál utilizas tú?
Yo me hago un cóctel, pues me gusta cambiar, pero fundamentalmente el reafirmante y el regenerador. Todos son de muy fácil utilización porque como yo soy una mujer trabajadora, que se levanta a la siete de la mañana y vuelve tarde, pensando en que las mujeres de hoy en día tenemos que tener cuidados de belleza que no sean complicados hemos creado estos sérums, que se pueden llevar en el bolso.
¿Dónde se pueden comprar?
De momento, on-line a través de nuestra página web que ya está operativa. El precio varía de 80,00 a 100,00, hasta el regenerador que es el más caro y cuesta unos 200,00 euros. Cada frasco tiene una duración media de un mes.
¿Quieres añadir algo más?
Pues que es un proyecto en el que he puesto mucha ilusión; y animar a la gente que quiera emprender porque en estos momentos es importante. ¡Emprender es el futuro porque no todos podemos ser funcionarios! Risas.
Nota a pie de página: Por cierto, ¿habéis caído ya en quién es Ana Rodríguez? Os confieso que yo me caí del guindo cuando ya estaba en el metro de regreso a casa. ¿Queréis saber porque me costó tanto reconocerla? Pues por la luz que desprendía, y que las fotos, por muy buenas que sean, no son capaces de captar.
Más información | Oceanyx