Hay productos de maquillaje que son prácticamente imprescindibles en nuestro neceser como es el caso de la máscara de pestañas. Es un producto que despierta la mirada de inmediato y embellece el rostro en todo su conjunto. Por esta misma razón dedicar algo de tiempo a elegir una buena máscara de pestañas nos ayudará a encontrar la que mejor se adapte a lo que buscamos: realzar,alargar, voluminizar, o por qué no, ¿todo a la vez?
Para ayudarte en la elección hoy vamos a analizar una de las últimas novedades que han llegado al mercado, se trata de la Falsies Push Up Drama de Maybelline que viene cargada de intenciones: alargar, aportar volumen y conseguir un efecto casi como si de unas pestañas postizas se tratase.
El packaging es muy mono, como veis combina con acierto el rojo y el rosa en un acabado metalizado. El diseño de su cepillo garantiza , a priori, un efecto push-up en las pestañas con cerdas de silicona y una forma de copa siendo más fino en la punta y más ancho en la base lo que permite llegar mejor a todas las pestañas.
En el interior el producto tiene una textura muy cremosa, enriquecida con diversas ceras que son las que ayudarán a elevar y fijar la curvatura de las pestañas.
Falsies Push Up Drama: experiencia
La primera vez que probé esta máscara de pestañas me recordó muchísimo a la Maxi Volumen de Deliplus (una de mis máscaras favoritas) tanto en la forma del cepillo que es estrecho y de púas cortitas, como en el acabado.
Para que saquemos el máximo partido a esta máscara debemos aplicarla sin prisas para evitar así un acabado apelmazado. Hay que trabajarla desde la primera capa, idealmente haciendo zig zag para que las pestañas queden definidas. Si solo buscamos un toque sutil con una suave pasada evidemente es suficiente pero si lo que realmente buscamos es un resultado "dramático" necesitaremos dos buenas capas.
El acabado final es de pestañas largas, voluminosas y negras, podemos decir que en parte se acerca a ese efecto "pestañas postizas" que promete la marca aunque aclararé que en ningún caso se pueden esperar unos resultados similares a los que podemos obtener con unas postizas.
En cualquier caso, siempre hay que tener en cuenta nuestro tipo de pestañas, si ya de base las tenemos largas el efecto siempre será mayor.
En cuanto al gupillon decir que los dos primeros días el párpado se me manchó bastante por la zona de la raíz de las pestañas, justamente por la estrechez del cepillo pero en cuanto le coges el punto (en mi caso al tercer día), eso ya no te pasa.
Otro punto importante es que no produce residuos bajo los ojos lo que significa que el producto tiene una buena fijación pero a la vez se retira muy fácil a la hora del desmaquillado, algo que se agradece la verdad.
Yo por ejemplo con el agua micelar de Bioderma la retiro sin problema, en cambio la máscara de Deliplus u otras marcas, a pesar de no ser waterproof son mucho más resistentes a la hora de desmaquillar y eso para todos los días como que no apetece. Así que en este aspecto genial.
Su precio es de 9,99 euros y solo existe en el tono Noir. Sin duda una gran opción si buscas una máscara con buenos resultados por menos de diez euros.
El producto fue facilitado por Maybelline para la prueba. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas para más información.