Durante el verano se producen importantes modificaciones en la piel por la disminución de las principales proteínas de su estructura. La piel al ir perdiendo capacidad para retener el agua comienza a deshidratarse por lo que su capa exterior se hace más gruesa, pierde elasticidad y firmeza. ¡Un auténtico engorro!
Pero que no cunda el pánico, la cosmética está aquí para ayudarnos. Hace ya tiempo oí hablar del agua de musgo, una agua con activos botánicos como la granada - que es un equilibrador de la hidratación celular que proporciona elasticidad y un efecto protector -, a la que han añadido ácido hialurónico de biosíntesis (que todos los profesionales conocen con el nombre de "esponja molecular), y un alga llamada enteromorpha que además de impulsar la síntesis del colágeno, contribuye al equilibrio celular.
Si nos la aplicamos por el rostro, el cuello y el escote después de haber estado expuestos al sol notaremos como este agua calma, relaja y equilibra nuestra piel, al tiempo que también le aporta la hidratación y la nutrición necesaria.
Se puede aplicar por la mañana antes de salir de casa, y después de tomar el sol antes de una buena crema hidratante. Este agua de musgo aumenta la capacidad de retener el agua en pieles secas o deshidratadas, lo que reduce el tamaño del poro y minimiza las líneas de expresión. Precio: 28,00 euros (100 ml).
El Agua de Musgo pertenece a la línea Vitalizadora de Secretos del Agua que se compone de un limpiador facial, una crema vitalizadora para devolver a la piel su flexibilidad, hidratación y energía necesaria para minimizar los estragos que causa el sol en la piel del rostro, en el cuello, en el escote y en el contorno de ojos y labios. Precio: 98,00 euros.
Todos estos productos están especialmente indicados para pieles sensibles pues están formulados con activos botánicos puros sin siliconas ni derivados del petróleo, que respetan la naturaleza original e la piel, y se pueden adquirir on-line.
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